Casa maldita de Amityville, 112 de Ocean Avenue temible historia

Por Evolucion2015

En el 112 de Ocean Avenue se encuentra ubicada la morada que hoy en día se conoce como la casa maldita de Amityville, nombre que se le atribuye por la muerte de la familia DeFeo a manos del hijo mayor. En el artículo de hoy, exploraremos todo lo referente a esta casa y su historia aterradora.

¿Dónde se encuentra la Casa maldita de Amityville?

Esta casa maldita se encuentra ubicada en una pequeña localidad de New York, Estados Unidos que se llama Amityville en el 112 de Ocean Avenue. Se trata de una morada constituida por tres pisos, cubierta por tejas oscuras y con una fachada blanca (aunque en un principio era de color negro). El solar de esta propiedad posee una forma rectangular e incluye un jardín que recorre toda el lugar, además de piscina privada y un embarcadero.

Con el paso del tiempo la numeración de la casa tuvo que ser cambiada del 112 de Ocean Avenue a ser el 108 de Ocean Avenue, esto se hizo con el objetivo de impedir que los fanáticos que entraran a la casa. En un mismo sentido, también se tuvieron que modificar las ventanas con forma de ojos del ático, por ventanas normales con postigos abiertos.

¿Qué sucedió en la casa maldita de Amityville?

La historia de la casa maldita de Amityville tuvo sus comienzos con una masacre que aconteció el 13 de noviembre del 1974, cuando un joven de apenas 23 años, llamado Ronald DeFeo, Jr. asesinó a sangre fría a toda su familia mientras estos se encontraban en sus camas durmiendo, con un fusil de gran calibre, alrededor de las 3:15 de la madrugada.

Las víctimas se trataban de sus padres (Ronald DeFeo padre, 44 años y Louise DeFeo 43 años) y sus cuatro hermanos (Dawn de 18 años, Allison de13 años Mark de 12 años y John de 9 años). Cada uno de los asesinados estaban en la misma posición boca abajo con sus brazos en cruz. Todos recibieron un disparo en la espada, salvo su madre que el impacto lo recibió en la cabeza.

Luego de la masacre, el hijo mayor recogió toda su ropa manchada de sangre, la funda del fusil y unas balas del arma, e introdujo todo en una funda de almohada, que más tarde sería encontrada por las autoridades en una alcantarilla llena de hojas secas.

Luego de deshacerse de la evidencia, Ronald se dirigió a un bar de su barrio, The Witches’ Brew, y le dijo al chico que trabajaba ahí, Joe Yeswit, que alguien había disparado a sus padres. En compañía del chicho se dirigieron a su casa y llamaron a la policía, diciendo que había ocurrido un tiroteo.

Cuando la policía llegó al lugar, lo inspeccionaron y hallaron los seis cuerpos sin vida y sacaron los cadáveres de la casa. Para las autoridades el hijo mayor era el principal sospechoso, puesto que era el único miembro de la familia que no había sido asesinado. En el interrogatorio, Ronald alegó que había salido pronto de su casa para adelantar trabajo, pero la hora de la muerte no encajaba y su coartada falló, lo que dio con su arrestado y posterior juicio.

Para poder alegar su inocencia, la defensa de Ronald se basaba en una voces que escuchaba en donde lo obligaban a cometer el crimen. Sin embargo, este testimonio era poco creíble dado que se sabía que Ronald tenía un pequeño historial delictivo y coqueteaba con las drogas. El joven perdió ante el juicio y fue condenado por seis homicidios de segundo grado, por lo tanto cumpliría cadena perpetua sin libertad condicional.

Con el paso del tiempo se encontró otra arma escondida en el embarcadero, por lo que se cree que el asesinato de la familia DeFeo pudo suceder por mandado de la mafia y que Ronald recibió ayuda para efectuar la matanza, tal y como declaró en una ocasión.

Actualmente existen diversas teorías para explicar los extraños acontecimientos en la casa, los cuales vivían atormentando a la familia Lutz. La principal teoría argumenta que todo fue una farsa para encubrir los verdaderos fines de la mafia, que lo que deseaban en realidad era quedarse con la fortuna de la familia DeFeo. Según esta hipótesis podría ser verdad puesto que las personas que deseaban esclarecer los sucesos allí ocurridos misteriosamente murieron.

La familia Lutz

George Lutz era un padre de familia de treinta años de edad. Era dueño de su propia empresa topográfica “William H. Parry, Inc.”. Durante los meses de julio y noviembre, él y su esposa Kathy Lutz habían recorrido y visitado alrededor de unas cincuenta viviendas en la costa sur de la isla, antes de decidirse a buscar en Amityville.

Ninguna casa de precio comprendido entre treinta mil y cincuenta mil dólares reunía todos los aspectos que la familia deseaba que tuviera su nuevo hogar, sobre todo la vista al mar y que el esposo pudiera llegar en poco tiempo a su trabajo.

Siguiendo con la búsqueda, George visitó la ”Inmobiliaria Conkin” de Massapequa Park y habló con la agente Edith Evans. La misma le indicó que tenía que tenía algunas casas que deseaba mostrarles y que podría hacerlo entre las tres y las tres y media de ese mismo día a lo que aceptó.

La mujer se mostró muy amable y que a pesar de no entender lo que ellos querían en una casa les deseaba mostrar aquella morada. El número 112 de Ocean Avenue es un enorme edificio de tres pisos, cubierto por tejas oscuras y fachada igualmente oscura.

Era un solar inmenso con un jardín que se extendía por toda la propiedad y un poste al final del camino empedrado de la entrada, hay un pequeño rótulo con el nombre adjudicado a la casa, el cual puso su anterior propietario: ”High Hopes”.

La casa del Amityville estaba en venta desde hacía más de un año. La casa no había sido anunciada por ningún canal pero estaba perfectamente descrita en la inmobiliaria de la señorita Evans: ”Zona residencial de Amityville: 6 dormitorios, colonial holandés, espacioso cuarto de estar, magnífico comedor, atrio cerrado, 3 baños, sótano completo, garaje para 2 coches, piscina de agua caliente y amplia caseta para botes”, el precio que pedían era de 80 000.

George estaba sorprendido por el precio de la casa, incluso llegó a pensar que había algún tipo de error, sin embargo, la vendedora le tuvo que aclarar que aquel hogar había ocurrido la masacre de la familia DeFeo. A pesar de este hecho, la pareja no le dio importancia.

La realidad era que la casa cumplía con todos los requisitos de su lista de deseos, y aunque la misma excedía su presupuesto, la pareja la consideraba su casa ideal. Al comprar la casa George sentenció: ”después de todo, los fantasmas no matan, las casas tampoco, solo matan las personas”.

El caso de la familia Lutz salió a flote solo por motivos de interés para reducir la sentencia de Ronald, al convencer al jurado que lo acontecido para esta familia había ocurrido por los fenómenos paranormales que su cliente había alegado, se podría reducir su sentencia. No obstante, esto no ocurrió así puesto que las familias posteriores a los Lutz no pasaron por los eventos de esta familia durante su estancia en la casa maldita de Amityville.

Situaciones paranormales

La familia Lutz afirmó que desde el primer día la casa parecía tener algo extraño. A raíz de esto llamaron al padre Pecoraro para que les bendijera su nueva morada, y en una de las habitaciones de la casa el mismo padre escuchó una voz que decía ”¡Fuera de aquí!”.

El padre Pecoraro le perturbó la coz pero continuó con labor de bendecir la casa y rechazó la propuesta de Kathy, de quedarse a comer en su casa, y salió lo más rápido posible de ahí. Una vez que se había terminado la bendición del padre, la familia continuo con sus labores de mudanza, como ordenar cajas, trastos, organizar ropa, mover cosas de lugar y demás tareas.

Cuando el día llegó a su final, Kathy y George acostaron a los niños y ellos se quedaron en la sala de estar. George encendió la chimenea puesto que sentía un frío glacial en la casa, aunque el termostato estuviese a una temperatura superior a 20 °C. Al llegar las once de la noche, George y Kathy se fueron a dormir por primera vez en su nueva casa.

El esposo se levantó al escuchar un fuerte golpe en la puerta principal. Al abrir la puerta no vio a nadie pero su perro se mantenía ladrando en el jardín y entonces se fijó en que la caseta de los botes se escuchaban gemidos sexuales y estaban las puertas abiertas. George se sentía extraño porque habría jurado que las había cerrado, por lo que pensó que era un sueño, cuando volvió a la cama el reloj marcaba las tres de la madrugada. Esa fue la primera noche que George se despertó a esa misma hora.

Al día siguiente el padre esta familia seguía sintiendo la casa helada, por lo que verificó que todas las puertas y ventanas estuvieran cerradas hasta que entró en el cuarto de costura. Cuando entró a esta habitación el mismo se quedó atónito al observar a cientos de moscas en la ventana, aunque estuvieran en pleno invierno, George cogió un periódico enroscado y mató todas las moscas que pudo y al resto las sacó por la ventana.

Esa misma noche, George se levantó en la madrugada y se percató que aunque todas las puertas y ventanas de la casa estaban cerradas, la del cuarto de costura no y está se abría generando un ruido horrible. Igualmente, la pesada puerta de la entrada se encontraba abierta, pero cuando George iba a cerrarla se dio cuenta que la misma había sido arrancada de sus ejes notándose que había sido forzada desde el interior de la casa.

Lo extraño era que solo él se hubiera levantado ante ese sonido, puesto que el ruido era muy fuerte como para que ningún otro miembro de a familia se levantara. Cerró la ventana de la habitación de costura, como pudo arregló la puerta principal y se regresó a la cama. De nuevo, el reloj marcaba las tres de la madrugada.

Al llegar el siguiente día, George llamó a un cerrajero para arreglar del todo la puerta de la entrada. Ese día transcurrió como cualquier otro, debían acomodar y organizar todo de la mudanza a pesar de que no quedaba mucho por hacer.

En dos ocasiones en el 112 de Ocean Avenue, aparecía una figura espeluznante que más tarde los demonólogos la clasificaron como una manifestación demoníaca. Aquel ser se presentó en la habitación donde estaba la chimenea por primera vez. Su rostro quedó plasmado en fuego sobre la pared de ladrillos del hogar.

Su segunda aparición fue en la habitación de los niños. Estos comenzaron a gritar en medio de la noche diciendo que había debajo de sus camas un monstruo. Cuando el padre salió de su habitación para verificar pudo observar una figura blanca, con una capucha y un rostro realmente espantoso que se encontraba debajo de las escaleras. Ese fue el último evento que la familia vivió en la casa maldita de Amityville antes de escapar.

Jodie

De acuerdo a los establecido por los demonólogos, Jodie es un ser demoniaco que se manifestó en forma de cerdo, dado que en ese lugar eran un sacrificio. El cerdo parecía estar casi de forma permanente en la casa, pues podía comunicarse con Missy con regularidad.

Extraña conducta de Missy

La esposa Kathy se dirigió a las habitaciones de arriba mientras su esposo prendía la chimenea. El frío no se iba de ninguna manera por lo que fue a visitar a sus hijos, cuando vio que de la habitación de costura salía su hija pequeña Missy. La conducta de Missy hizo que su madre se parara para observar a la niña, que no le había visto.

La niña estaba caminando hacia el cuarto que estaba al lado del de costura, canturreando. Cuando llegó, se sentó en la cama mirando hacía la ventana y dijo: ”¿No es hermosa la nieve, Jodie?”. La madre le preguntó a su hija con quien estaba hablando a lo que la pequeña respondió que con Jodie, un cerdito amigo que ella solo podía ver. Luego de esto, Kathy mandó a dormir a su hija y luego ella con su esposo hicieron lo mismo.

Como era habitual, el esposo se despertaba a las tres de la mañana y se quedaba mirando la ventana. Las puertas de los botes de basura de nuevo habían sido abiertas por lo que bajó a cerrarlas, al mirar a la casa vio a su hija Missy en la ventana y detrás suyo había un cerdo enorme.

Ante este hecho, el padre entró a toda velocidad a la casa, subió las escaleras y entró al cuarto de la niña solo para comprobar que estaba dormida tranquilamente en su cama y no había ningún cerdo a su alrededor.

Apariciones de Jodie

Una de los incidentes con Jodie ocurrió en la sala de estar de la casa de Amityville. Mientras los niños estaban durmiendo en sus habitaciones, los padres estaban en la sala hablando acerca de los sucesos extraños en su nuevo hogar. La esposa ajo la preocupación se levantó para abrazar a su esposo pero lanzó un grito y se echó las manos al rostro. El marido al darse vuelta pudo ver que unos ojos en la ventana los estaba observando. Cuando George salió vio unas pisadas de cerdo de al menos cien kilos.

Missy se encontraba en su habitación cantando cuando su madre entró y vio como su pequeña mecedora se movía sola, pero no dijo nada para evitar perturbar a su pequeña que continuaba cantando. Al preguntar de nuevo con quien hablaba la niña esta respondió que con Jodie, y le contó lo que él le había dicho. Jodie le había contado a Missy que antes vivía un niño en su habitación pero que pronto enfermó y murió.

También le dijo que no le agradaba nada Kathy y que Missy debía quedarse en la casa para siempre para que pudiera jugar con el niño que murió. Cuando la madre escuchó esto último le preguntó a su hija por donde se había ido Jodie, Missy señaló la ventana y en ella estaba un enorme cerdo gimiendo de forma horrible.

Al ver esta imagen la madre gritó y George subió a ver lo que ocurría, al ver también al cerdo, tomo una de las sillas de la habitación y la tiró contra la ventana. Jodie empezó a gritar y se fue corriendo por la nieve. LA niña entonces realizó un dibujo del cerdo corriendo en la nieve.

El abogado de Ronald DeFeo declaró en un programa de televisión del canal Discovery que el mismo le había narrado a la familia muchas de las anécdotas de las cuales tranquilamente se pudieron haber válido para poder idear famosas historias de eventos paranormales.

Al mismo tiempo argumentaba que la familia poseía un gato que se posaba en la ventana del segundo piso y que durante las noches se podían vislumbrar sus ojos en la oscuridad, que lo mas seguro es que los Lutz hubieran inventado todo.

La habitación roja

La habitación roja era una habitación secreta que la pareja había descubierto en el interior de la casa maldita de Amityville. Kathy y George se encontraban colocando algunos alimentos sobre la alacena que utilizaban como pequeña despensa, cuando uno de los tablones de madera se separó un poco. Guiados por su curiosidad, la pareja empujó un poco más la tabla de madera hasta que la derribaron, lo que vieron los dejó sin palabras.

Atrás de aquella alacena había un cuarto muy pequeño de aproximadamente 1,20 por 1,50 metros, pintado en su totalidad de rojo desde el techo hasta el suelo. En esa misma habitación había una especie de pozo mal sellado que desprendía un olor fétido. Al consultar los planos originales de la casa, no había indicios de que ese cuarto o el pozo estuvieran allí.

Poco después, se enteraron que Ronald DeFeo se dedicaba a sacrificar cerdos y otro tipo de animales dentro de la pequeña habitación. De una misma manera, en uno de los documentales de Discovery reveló un testimonio por uno de los amigos más cercanos de esta familia en que este cuarto fue pintado por los hijos de Ronald DeFeo padre y Louise DeFeo para utilizarlo como cuarto de juegos.

Levitaciones de Kathy

Mientras estuvo viviendo en la casa, Katy sufrió de algunos eventos que la dejaron marcada psicológicamente, uno de los cuales fue la levitación. Durante dos o tres noches continuas su esposo se despertaba y la encontraba flotando a unos dos palmos por encima de la cama. El primer día que la vio de esta forma se pudo dar cuenta que su rostro no era el mismo, sino que parecía una mujer de ochenta años.

Las arrugas estaban marcadas en su rostro y su cabello se había vuelto de color blanco. Cuando volvió en sí, Kathy se dirigió al baño para percatarse de su aspecto. Tanto ella como su esposo estaban alterados, por suerte, las arrugas y el cabello blanco fueron desapareciendo y al día siguiente no quedó rastro de estos acontecimientos.

Su piel volvía a su tono natural y su cabello se iba tornando castaño de nuevo. En el segundo día la levitación de Kathy fue más aterradora, puesto que la habían marcado y las quemaduras iban desde debajo de su pecho hasta el pubis. Estas marcas tenían un color extremadamente rojo y al tocarlas ardían, como si la hubieran quemado con fuego. Sin embargo, la pareja no llamó al médico por la extraña situación en la que se habían producido las heridas.

Sueños

Otro de los acontecimientos que la esposa sufrió durante su vida en la casa maldita de Amityville fueron sueños extraños. Estos eran acerca de su familia siendo asesinada por un rifle por la noche, o que una mujer mantenía relaciones sexuales con un amante, en la misma cama en la que Kathy estaba durmiendo.

Al tiempo, Kathy se enteró que la mujer de sus sueños era la antigua propietaria que había sido asesinada, Louise DeFeo y que la misma había mantenido en secreto a un amante. Estos sueños se fueron manifestando de manera habitual hasta que dejaron la casa.

La visita de Francine

Ante todos los acontecimientos que estaban sucediendo en la casa maldita de Amityville, George recurrió a un buen amigo suyo que conocía a Francine, una mujer que según tenía poderes sobrenaturales, es decir, era una médium. Al nacer, la mujer tenía el velo de veneciano y por esto es que se pensaba que la misma poseía poderes.

Una vez que Francine había llegado a la morada estableció una conversación con el padre de la familia y tocó el tema de las presencias sobrenaturales. Le pidió al mismo que acercase la mano a cierto lugar y éste lo hizo. Al hacer esto pudo sentir una corriente aire frío cerca de la cocina. Cuando la mujer entró a esta habitación se percató de un olor extraño, como a colonia barata. La esposa se quedó sorprendida puesto que ella no había hablado acerca de sus contactos en la cocina.

Francine comentó que en aquel cuarto había un hombre y una mujer de edades avanzadas, seguramente habían sido los dueños del hogar antes o, eran una pareja que se habían alojado en la casa luego de su muerte. Al entrar en el sótano la mujer indicó que posiblemente había ocurrido un entierro, dado que sentía la presencia de personas enterradas bajo el suelo, y que lo más seguro es que alguna de ellas hubiera sido asesinada.

Ya habiendo hablado sobre este tema, les pidió a la pareja salir todos de esta habitación puesto que no se sentía bien estar allí. Al estar en el primer piso no quiso entrar ni a la habitación de costura o el cuarto de la pequeña Missy, la razón de esto era porque en ambos lugares había una carga negativa.

Esto mismo ocurrió con el cuarto de juego de los niños, además de percatarse de que en ellos había una corriente de aire helada. Ya habiendo terminado con el pequeño recorrido de la casa, la mujer decidió que era momento de retirarse. En la puerta de la entrada le dirigió la palabra al amigo de George, Eric, alegando que jamás quería pisar ese lugar, puesto que las energías en la cas eran muy negativas.

Ha sido todo por el artículo de hoy sobre la Casa maldita de Amityville, esperamos que la información proporcionada haya sido de gran utilidad. Le hacemos la invitación a leer también: Santa Maria Novella y Castillos De Irlanda