Navas, a punto de marcar el gol de la victoria - AFP.
Hay jugadas que, para bien o para mal, permanecen en la memoria del aficionado con la misma naturalidad que las tablas de multiplicar. El gol de Iniesta en el Mundial de Sudáfrica va de la mano de la parada previa de Iker Casillas a Robben en la final del Mundial de Sudáfrica o del penalti parado a Cardozo en cuartos. Los éxitos de España también se explican desde su capitán, Casilas, inmenso en los peores momentos de su equipo. El portero puso color a un partido gris de España ante Croacia, sólo doblegada en el minuto 87 tras una jugada de salón, con una asistencia de sombrero de Cesc y un control con el hombro de Iniesta de esos que paralizan el tiempo. El 6 le pasó al 22, Jesús Navas (Los Palacios, Sevilla, 1985), que había entrado por Torres y marcó tan solo que quiso meterse en la portería. Un gol de definición sencilla y elaboración complicada que tranquilizó a una España angustiada y previsible que jugó con fuego y rozó la eliminación varias veces. Una España salvada por Casillas, espectacular para despejar en el vuelo un cabezazo de Rakitic y para responder después a un chutazo de Perisic. Rescatada por su portero titular y primera de grupo por el gol de un extremo suplente que oposita para dejar de serlo, la selección alcanzó los cuartos de final de la Europa de Ucrania y Polonia, donde se enfrentará al segundo del grupo D: Francia, Inglaterra o Ucrania. Italia, que venció a Irlanda 2-0 con tantos de Cassano y Balotelli, se medirá al primero de dicho grupo. Acostumbrada a acosar, la selección se sintió acosada en el epílogo por una Croacia más entera y motivada y fresca de Vida y Perisic, precisamente quien tuvo en sus botas una de las mejores ocasiones. También estuvo cerca del gol en un córner el central Corluka, que como el resto de sus compañeros denunció el empujón en el área de Busquets, falto de miras de miras poco antes cuando en vez de chutarle a Pletikosa quiso servirle el gol a Jordi Alba. Tras el susto de Corluka llegó el gol balsámico de Navas, refresco de un Torres muy discreto, tanto que en la primera parte tocó 13 veces la pelota, tan sólo dos menos que Casillas. Aunque fue Torres quien tendría la primera ocasión de verdad de España en los primeros 45 minutos en una jugada que recordó al gol de Belletti en la final de Champions en Roma, pero que acabó con Peltikosa despejando con una pierna. Apenas tenía ángulo Torres, extremo ocasional tanto en la izquierda como en la derecha. Los números decían que España tenía el 77% de la posesión de la pelota, pero ese control no se traducía en peligro, por más que entre Silva e Iniesta tramasen diabluras y hasta los centrales, Piqué y Ramos, lo probasen desde fuera del área. Al partido le faltaba chicha e intensidad, un punto emotivo, como la tremenda parada de Casillas ante Rakitic tras un servicio de Modric. La entrada de Navas reactivó a España, que padeció lo suyo hasta que el extremo sevillano marcó a placer el tanto de la tranquilidad en una noche de nervios: “Hemos madurado el encuentro hasta el final”. CROACIA 0: Pletikosa; Vida (Jelavic, min. 66) , Corluka, Schidenfeld, Strinic; Rakitic, Vukojevic (Eduardo, min. 80); Srna, Modric, Pranjic (Perisic, min. 66); Mandzukic. ESPAÑA 1: Casillas; Arebeloa, Piqué, Sergio Ramos, Jordi Alba; Xavi Hernández (Negredo, min. 89), Busquets, Xabi Alonso; Silva (Cesc Fabregas, min. 71), Iniesta y Fernando Torres (Jesús Navas, min. 61). Goles: 0-1, min. 87: Jesús Navas. Árbitro: Wolfgang Stark (ALE). Mostró cartulina amarilla a los jugadores de Croacia Corluka (min. 27), Srna (min. 44), (Strinic) min.53) y Rakitic (min. 90). Incidencias: encuentro correspondiente a la tercera jornada de la Eurocopa del Grupo C, disputado en el estadio Arena Gdansk ante la presencia de 39.000 espectadores.