Según datos del Instituto Nacional de Salud (INS) hasta la semana epidemiológica 37 de 2013 fueron notificados 209 casos de meningitis y en 2014, el número aumentó a 236. Sin embargo, el dato que preocupa a las autoridades sanitarias es la cifra de 2015, que ya asciende a 2913 casos reportados en el mismo periodo, confirmándose de ese total 9 muertes por meningococo.
La meningitis bacteriana y particularmente por meningococo es proclive de ocurrir bajo cualquier condición climática y puede ser provocado por un serogrupo, teniendo múltiples consecuencias para las personas y para una población.
Detalladamente, en 2015 se han notificado 66 casos de meningitis por meningococos, de las que 44 han sido casos confirmados y 22 probables, de acuerdo con el Boletín Epidemiológico del INS para la semana 37 del año.
Según la entidad, aún si se lleva a cabo tratamiento antibiótico, la proporción de letalidad de la meningitis por meningococo oscila entre 10 y 15%. Asimismo, según las cifras, aproximadamente entre 11 y 19 de cada 100 sobrevivientes tendrán discapacidades a largo plazo, como pérdida de extremidades, sordera, problemas en el sistema nervioso o daño cerebral.
La meningitis por meningococo es uno de los tipos de meningitis bacteriana que más prevalece en Colombia, y las bacterias que causan esta infección se pueden propagar cuando las personas tienen contacto cercano o prolongado con la saliva de alguien infectado. Ejemplo de esto es por medio de un beso o la tos, especialmente si viven en el mismo lugar.
No obstante, la meningitis por meningococo es una enfermedad prevenible por vacunación, mediante medicamento disponibles que han mostrado eficacia y efectividad contra los serogrupos A, C, W e Y. Estas son vacunas conjugadas protegen a largo plazo y pueden ser aplicadas en lactantes y, además, buscan reducir la portación asintomática de estas bacterias ayudando de esta forma a la protección del resto de la población no vacunada, en lo que se conoce como ‘inmunidad de rebaño’.
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