HISTORIA Y DESCRIPCIÓN
El castillo de Casarrubios del Monte fue construido en el siglo XIV por Don Alfonso Fernández Coronel, que por entonces era señor de la villa, o tal vez por Don Diego Gómez de Toledo, notario mayor de Castilla, a quien fue donado por Pedro I en el año 1354 tras la ejecución y confiscación de los bienes de aquel, donación fechada el 14 de agosto de 1354.
En 1426 Doña Marina de Córdoba, hija de Don Pedro Suárez de Toledo y casada con el almirante de Castilla Don Fadrique Enríquez, era la señOra de Casarrubios.
La siguiente dueña y señora fue Doña Juana Enríquez, reina de Aragón, quien se lo cedió al rey Enrique IV, quien a su vez lo dono al almirante castellano. Pero enemistado con éste, en 1467 se lo entrego a su hermana Doña Isabel la Católica con la condición de que no lo enajenara. Sin embargo Doña Isabel se lo devolvió al almirante con la confirmación del príncipe-rey Don Alfonso. Esto irrito al rey, y el 24 de noviembre de 1468 lo donó al comendador de Montiel Gonzalo Chacón, futuro secretario real. Año y medio después el rey lo entregaba al futuro conde de Fuensalida.
Muerto Enrique IV, el rey católico Don Fernando, como heredero de su madre la reina de Aragón, devolvía Casarrubios a don Gonzalo Chacón en noviembre de 1475. Don Gonzalo, de quien vemos el escudo en su entrada, formó un mayorazgo con la villa y su fortaleza y en 1599 Felipe III creó el condado de Casarrubios, que heredó el conde de Miranda y duque de Peñaranda.
Tras él, a principios del XIX era su señor Don Cipriano Portocarrero, conde de Montijo, luego su hija Doña María Francisca, y después su hijo, el duque de Alba. En 1899 un vecino de Casarrubios compró el castillo y palacio condal.
Esta fortaleza, aunque nunca presenció hechos de armas que se sepa, fue de las últimas que conservaron su armamento. Consta que tenía cuatro cañones, dos de los cuales fueron cedidos al Alcázar de Toledo y en 1843. La condesa de Montijo, futura emperatriz, regalo los otros dos al Parque de Artillería de Madrid, hoy Museo del Ejército.
De planta rectangular, la fortaleza fue adosada a la muralla que defendía el pueblo, hoy desaparecida. Interesantes son sus torres hexagonales, un avance arquitectónico del s. XIV, en que fue construido, popularizado por los templarios, y cuyo fin era defender mejor el perímetro de los atacantes. Simétricamente, la torre del homenaje también dispone tres pequeñas torres hexagonales en tres de sus ángulos.
A su constructor, Alfonso Fernández Coronel, se le atribuye la frase “Castilla hace a los hombres y los gasta”. Había sido hecho señor de Aguilar por Alfonso XI, pero a la muerte de éste cayó en desgracia. Antes de ser degollado y quemado por orden del nuevo rey, Pedro I, pronunció la citada sentencia.
Fuente: http://www.turismocastillalamancha.es/patrimonio/castillo-de-casarrubios-del-monte-97964/visita/
http://www.monumentalnet.org/castilla_la_mancha/toledo/casarrubios_del_monte/casarrubios_del_monte/castillo_de_casarrubios_del_monte.php