Cat Power: Admiración y Decepción en la Riviera de Madrid

Publicado el 20 noviembre 2014 por Esterova @FranticSouls
El pasado domingo asistimos a uno de los conciertos más esperados del mes de Noviembre. La estadounidense Cat Power pasó por la Riviera de Madrid, supuestamente para presentar su último trabajo. 

Foto de: Aida Pérez

La sorpresa fue general cuando apareció ella sola sobre el escenario, tan solo acompañada por una guitarra, y comenzó a interpretar sus temas. La sorpresa pasó a perplejidad cuando fuimos conscientes de que su banda no haría acto de presencia.
Conociendo a esta gran artista todos sabíamos que cualquier cosa podía en su actuación, tanto un concierto brillante como un desastre absoluto. En esta ocasión no hubo espectáculos desconcertantes, sino una actuación intimista y pausada, que no dejó a nadie indiferente. Buena prueba de ello es la divergente opinión de nuestros dos corresponsales ocultos entre el público, que comparten con nosotros a continuación:
Aida Pérez:
Domingo. 9 y media de la noche. Frío invernal en Madrid. Los que pensaban que el concierto de Cat Power les haría entrar en calor, debieron llevarse una gran sorpresa al descubrir que Chan Marshall se presentó en el escenario a pelo, ella sola con una guitarra, un piano, y un repertorio basado en su discos menos populares, que dejaba de lado su último experimento electrónico 'Sun' y su memorable 'The Greatest'.

Foto de: Aida Pérez

Lo que Cat Power nos trajo al desacertado escenario de la Riviera esa noche fue un puñado de grandes canciones (más de 30, una tras otra sin apenas descanso para coquetear con el público), un montón de versiones personales, frágiles pero contundentes, que lograron mantener el pulso y la intensidad al menos entre las primeras filas de asistentes que allí permanecimos las casi dos horas de concierto que nos ofreció, y que nos recordaron porqué la suya es una propuesta que merece la pena ir a ver, a pesar del lugar, de la estación o del día.
Germán Serrano:
Una actuación algo larga y con poco dinamismo. Actuar sin banda detrás es toda una apuesta que puede lucir mucho, pero que también conlleva su riesgo. En el caso de Cat Power, los temas lentos, con poca variedad de acordes y en una línea muy similar, no relucieron demasiado y conformaron una actuación poco atractiva (al menos para los seguidores no incondicionales). La gran voz de la cantante fue el centro de la noche, pero no resultó suficiente para compensar el coste de la entrada o cubrir las expectativas que generan sus álbumes. Reflejo de esto fue el número de personas que abandonó la sala antes del final del evento.
Si tú también asististe al concierto, no dudes en hacernos llegar tu opinión!