Organizador y Ponente: Nacho Coterón Gonzalo (presidente de ASPA)
ENTRANDO EN ANTECEDENTES
La zona vinícola del Loira viene enmarcada por el curso del río que le da nombre. Aparte de sus famosísimos castillos que ya nos dan una idea de la tradición y abolengo de la zona (donde hay nobleza o clero siempre ha habido buenos vinos), debemos saber que nos encontramos ante la tercera zona vinícola de Francia en cuanto a importancia y calidad.
Sus cerca de 500 kilómetros de recorrido fluvial más los márgenes de sus afluentes dan para 60 A.O.C. y 27 V.D.Q.S. (87 denominaciones en total) que se pueden reunificar en 3 subzonas en un intento de simplificar una de las zonas vinícolas más complejas de Francia (La segunda después de Borgoña).
En la subzona del Alto Loira la variedad reina es la Sauvignon Blanc que se aclimata perfectamente a suelos pedregosos y minerales con alta pluviosidad y temperaturas frías.
En el Loira Central abunda la Chenin Blanc, usada sobre todo para vinos con cierto contenido en azúcar, larga guarda en botella y capacidad para contraer botrytis cinérea. También se da la casta tinta Cabernet Franc, en su versión más norteña y fresca que dará algunos vinos que, como en el caso del de esta cata, sorprenden por su calidad y equilibrio, huyendo del tópico de que los tintos del Loira son de una calidad inferior a los de otras zonas más septentrionales.
El Bajo Loira nos presenta una orografía algo menos proclive a dar vinos de gran expresión, predominando las variedades Muscadet y Chardonnay en sus versiones más ácidas, frescas y sin pretensiones.
Tras una exposición sobre las características ampelográficas de las variedades y sus propiedades organolépticas, se dio una pormenorizada relación de lo que ofrece la gastronomía de la zona y sus posibles maridajes.
LOS PROTAGONISTAS DE LA CATA
DOMAINE VACHERON 2.008
A.O.C. Sancerre
En nariz se presenta pleno de cítricos y notas vegetales verdosas, bajo las que apunta alguna nota amielada y de manzana madura. En el momento en que se abre se sobrepone al conjunto una carga aromática alcohólica que sin desvirtuarla por completo hace bajar algunos enteros a la nariz inicial.
En boca se presenta verde y mordiente, con la acidez todavía muy alta, pero dando muestras de una pesadez y un cuerpo que aguantará bastantes años en botella para lograr que se ensamble un conjunto que en este momento dista mucho de estar consolidado. Promete calidad y buena estructura con el tiempo (3 años o más).
Variedad: Sauvignon Blanc. Bod. Vacheron et fils. Cher (Sancerre). Grad. Alcoh:: 13º. P.v.p. aprox.: 19 €.
CLOS DE LA COULÉE DE SERRANT 2.007
A.O.C. Savennieres - Coulée de Serrant
El color llama la atención por la tonalidad tan evolucionada que presenta, pese a tratarse de un 2.007. Se debe a una ligera sobremaduración conseguida a través de 5 triajes diferentes sobre la misma viña, a una crianza sobre lías y a una ausencia de filtrados y demás “afeitados”, siguiendo las normas de la viticultura biodinámica en su línea más dura.
La nariz se presenta algo corta en cuanto a intensidad, dando notas a mazapán, manzana asada y algún ahumado. Toques licorosos. Al reposar y abrirse el vino, cambia a caramelo y dátiles.
En boca es extremadamente pesado y alcohólico, sin atisbos de la dulzura que se creía vislumbrar en nariz y enormemente seco. Tiene mucha presencia y peso en boca y un cierto parecido aunque lejano con los vinos encabezados del marco de Jerez. Es un vino fuerte y difícil de beber, pero con una personalidad muy marcada que puede crear adeptos (no es mi caso).
Variedad: Chenin Blanc. Bod. Nicolas Joly. Savennieres. Grad. Alcoh:: 15,5º. P.v.p. aprox.: 100 €.
DOMAINE DIDIER DAGUENEAU. BLANC FUMÉ DE POUILLY 2.008
A.O.C. Blanc Fumé de Pouilly
Tiene una nariz de poca intensidad donde predominan los cítricos y las notas vegetales. Al reposar se transforma en un festival de especias (pimienta, nuez moscada) y minerales que lo hacen muy atractivo y nos predisponen a catar un vino de una calidad excepcional…dentro de unos 10 años o más, ya que en boca aparece indómito, alcalino y ácido como él solo, dañando las mucosas del paladar y demostrando un posgusto largo y ácido, similar a la sensación de morder un limón verde. Una pena abrir antes de tiempo un vino que sin duda tiene un gran potencial y una enorme personalidad. Será un producto muy a tener en cuenta en la próxima década para quien tenga la paciencia y la previsión de atesorar unas cuantas botellas.
Variedad: Sauvignon Blanc. Bod. Louis – Benjamin Dagueneau. Saint Adelain. Grad. Alcoh:: 12º. P.v.p. aprox.: 95 €.
PALLUS 2.006
A.O.C. Chinon.
Vino tinto con un color negro violáceo y una capa muy alta, donde el ribete nos da muestras de muy poca evolución y una gran concentración de materia colorante.
La nariz se presenta llena de tinta china, pimienta negra, licor de cassis y toques de pizarra. Una fruta roja madura se deja ver tras estos marcadores inequívocos de calidad. Los tostados de la madera, presentes pero sin molestar ni enmascarar los aromas primarios y jóvenes.
En boca es fluido y ligero con un centro enormemente frutal y especiado donde si se vislumbran por retronasal algunas notas de crianza en forma de cuero, tabaco y cacao. El posgusto es medio y exento de sobremaduraciones, recordándonos de forma fehaciente que tenemos en boca los taninos de una uva que, aunque madura, crece donde el sol es un verdadero artículo de lujo.
En resumen, la calidad y buen hacer del bodeguero rompe con el tópico que expuse al principio del artículo y demuestra que se pueden disfrutar de tintos sino grandes, al menos de una buena talla cualitativa.
Variedad: Cabernet Franc. Bod. Domaine de Pallus (Chinon). Grad. Alcoh:: 13º. P.v.p. aprox.: 25 €.
DOMAINE DE BAUMARD CARTE D’OR 2.009
A.O.C. Coteaux du Layon
Color poco evolucionado y algo acuoso. Esto está de acorde con la edad del vino, pero se espera que estos vinos presenten algo más de concentración por la sobremaduración.
La nariz se presenta bastante mineral y con notas de manzana y orejones, aunque detrás se vislumbran notas cítricas (pomelo).
En boca es un vino mediocre y completamente disociado, donde el alcohol y un azúcar excesivo van cada uno por su lado, a lo que hay que unir una acidez muy baja que lo termina de rematar. No empalaga por lo acuoso y ligero, pero la poca acidez hace que hastíe en la primera copa.
Variedad: Chenin Blanc. Bod. Domaine de Baumard (Rochefort sur Loira). Grad. Alcoh:: 12º. P.v.p. aprox.: 20 €.
DOMAINE DE BAUMARD QUARTS DE CHAUME 2.006
A.O.C. Quarts de Chaume
Con un bonito color oro viejo y una nariz botrítica que se combina con manzana asada, compota de ciruela y miel, se nos presenta como un vino licoroso en toda regla, aunque la fluidez en copa ya nos separa de los tipo sauternes para asemejarse más a los vecinos del Rhin. Unas notas vegetales y balsámicas (laurel y tojo) le quitan pesadez olfativa.
En boca denota peso y poderío alcohólico, perfecta conjunción entre azúcar, acidez y alcohol y un ligero retrogusto amargo (pomelo) que redondea el conjunto y lo hace pleno de sabores pero a la vez liviano y sugerente para tomar una segunda copa.
Variedad: Chenin Blanc. Bod. Domaine de Baumard (Rochefort sur Loira). Grad. Alcoh:: 12º. P.v.p. aprox.: 60 €.