En resumen, una degustación nada memorable desde mi punto de vista, donde destacaría Carro 2012 como un vino fresco y sencillo de chateo, y sobre todo Biga de Luberri 2010, como un vino más serio y con una buena presencia.
En resumen, una degustación nada memorable desde mi punto de vista, donde destacaría Carro 2012 como un vino fresco y sencillo de chateo, y sobre todo Biga de Luberri 2010, como un vino más serio y con una buena presencia.