Camino de "herradura" de Catacocha-San Pedro Martir
Amaneció bien feo por las últimas lluvias, amenazaba con descargar una buena tromba de agua antes de salir a caminar por el antiguo camino de herradura entre Catacocha y San Pedro Martir, pero bien preparados empezamos la marcha dispuestos a que nada nos lo impidiera. La Ruta de los Cerros iniciaba así su actividad en este 2015 a pesar del clima, que a la postre le dio un toque místico a la ruta difícil de olvidar. Caminar entre vegetación con la mágica bruma que nos acompañó durante todo el día resultó indescriptible.
Por la entrada de Las Parrilladas del eMe hacia la lotización Victamar y campo a través, los senderos se tornan encantadores dirigiéndonos hacia la perimetral que rodea la ciudad para seguir la ruta por el sendero enlodazado que nos exigió sortear varias lagunas empozadas en el propio camino, que le dio a la caminata un punto de divertimento extra.
Desde esta pequeña población el sendero de subida hacia las Lagunas de Tundunda se presta provocador para caminantes ávidos de aventura, y como no podía ser de otra manera nos entregamos a la exigente subida esperando una recompensa en forma de paisajes dignos de contemplar. Así fue, la niebla dibujaba un entorno místico en la laguna que ya empezó a recibir las primeras aguas embalsadas, dándole un aspecto de infinidad al lugar que nos atrapó nada mas llegar.
Laguna de Tundunda, Catacocha
En la vuelta nos desviamos para visitar la construcción de la “Quinta botella”, una casa donde sus paredes están completamente hechas de botellas de vidrio. Su dueño, Pepe Sánchez, tuvo la amabilidad de explicarnos el trabajo que está realizando desde hace tres meses y donde la muy avanzada construcción contempla unas 5000 botellas dispuestas magistralmente, aunque para su finalización calcula que aún pueden faltar unas 3000 más.
Desde Ecuador del Sur felicitamos por tan hermosa iniciativa y comunicamos a todos nuestros lectores que si tienen a bien, pueden traer botellas al local de Las Parrilladas del eMe para su posterior cesión a don Pepe Sánchez para continuar con su preciosa labor.