El Ayuntamiento de Barcelona ha dado un paso significativo en la promoción del catalán en entornos digitales con la constitución de una comisión no permanente de estudio. Esta iniciativa, presentada este jueves, tiene como objetivo principal fomentar el uso del catalán entre los jóvenes y en los nuevos formatos tecnológicos. En la primera sesión de la comisión se presentó un informe que revela una preocupante disminución del uso social del catalán, especialmente entre las generaciones más jóvenes, donde actualmente solo el 36% de los barceloneses lo utilizan como lengua habitual.
La comisión cuenta con el apoyo de diversos grupos políticos, incluyendo al PSC, JxCat, Comuns y ERC, quienes se han posicionado a favor de esta iniciativa. El objetivo es revertir la tendencia a la baja en el uso del catalán, particularmente en el ámbito digital, un entorno donde los jóvenes pasan cada vez más tiempo. La estrategia municipal busca abordar esta situación con propuestas concretas, incluyendo la participación de expertos en telecomunicaciones, medios digitales y creadores de contenido.
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El desafío del catalán entre los jóvenes y en la tecnología
La comisión de estudio no solo se centrará en el diagnóstico actual del uso del catalán, sino también en la exploración de nuevos formatos audiovisuales, el creciente mundo de los videojuegos y la influencia de los creadores de contenido en plataformas digitales. Además, se analizarán proyectos exitosos en otros territorios de habla catalana y en el extranjero, con el fin de adaptar estas ideas al contexto de Barcelona. Entre los expertos que participarán en las cinco sesiones programadas hasta noviembre se encuentran figuras relevantes como Rosa Romà, directora de la Corporació Catalana de Mitjans Audiovisuals; Genís Roca, presidente de la Fundación PuntCat; y Àlex Hinojo, primer wikipedista residente en Cataluña y gestor cultural.
Datos preocupantes sobre el uso del catalán
El informe presentado por la teniente de alcalde Maria Eugènia Gay destaca una tendencia que se ha ido consolidando en los últimos años: el retroceso del catalán como lengua habitual en Barcelona. Según la Encuesta de Servicios Municipales de 2023, el catalán es utilizado regularmente por el 36,5% de la población, mientras que el castellano sigue siendo la lengua dominante, hablada por el 55,9% de los barceloneses. Además, un 7,4% de los encuestados afirma utilizar otras lenguas en su vida cotidiana.
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En el caso de los jóvenes, la situación es aún más preocupante. Según la Encuesta a la Juventud de Catalunya de 2022, solo el 32% de los jóvenes catalanes tiene el catalán como lengua inicial, mientras que el 48% tiene como lengua materna el castellano. Esto refleja un cambio generacional en la preferencia lingüística, que se ve potenciado por la globalización y el aumento de la población nacida fuera de Cataluña.
El catalán en el ámbito digital y el descenso en las redes sociales
El uso del catalán en entornos digitales también ha disminuido significativamente en los últimos años. Según datos del Idescat, en 2021, solo el 27,8% de los catalanes utilizaba el catalán siempre o casi siempre para interactuar con webs o blogs, mientras que en 2017 esta cifra era similar, con un 27,6%. Sin embargo, el uso habitual del catalán en chats y foros ha disminuido de manera preocupante, pasando del 24% en 2017 al 16,7% en 2021. Este descenso también se refleja en las redes sociales, donde el uso del catalán ha caído del 31% en 2017 al 24% en 2021.
Un área donde el uso del catalán se ha mantenido relativamente alto es en la mensajería móvil, donde el 40% de los encuestados afirmaron utilizarlo habitualmente. Sin embargo, esta cifra ha disminuido desde el 47% que se registraba en 2017. Estos datos reflejan la necesidad urgente de actuar para fomentar el uso del catalán en estos entornos, que son fundamentales para la comunicación diaria de los jóvenes.
Un cambio demográfico que impacta el uso de la lengua
El cambio demográfico en Barcelona es otro factor clave que afecta al uso del catalán. Según el Idescat de 2023, solo el 55% de la población de la ciudad ha nacido en Cataluña, mientras que un 31% ha nacido en el extranjero. Este fenómeno ha cambiado la composición lingüística de la ciudad, contribuyendo a la disminución del catalán en favor de otras lenguas. Además, la proporción de catalanes y residentes nacidos en el resto de España ha disminuido del 76% en 2018 al 69% en 2023.
Esta diversidad lingüística, aunque es un reflejo de la globalización y la apertura de Barcelona al mundo, también plantea desafíos para la preservación del catalán. Sin políticas públicas efectivas que promuevan el aprendizaje y el uso de la lengua, el catalán corre el riesgo de seguir perdiendo terreno en la ciudad.
Comisión no permanente de estudio
El Ayuntamiento de Barcelona, con la creación de esta comisión no permanente de estudio, está tomando medidas necesarias para abordar el retroceso del uso del catalán entre los jóvenes y en el ámbito digital. La participación de expertos y la implementación de estrategias concretas serán clave para revertir esta tendencia. A medida que Barcelona sigue creciendo y diversificándose, la promoción del catalán en todos los ámbitos, especialmente en los nuevos formatos tecnológicos, será esencial para asegurar su futuro como lengua viva en la ciudad.