La Catedral de la Almudena es la iglesia más grande de la ciudad y está situada junto al Palacio Real de Madrid. Tomó más de cien años completarla. Esta catedral parece mucho más antigua de lo que realmente es: fue consagrada tan recientemente como en 1993.
Historia de la Catedral de la Almudena
No fue sino hasta 1879 que la capital de España finalmente comenzó a planificar la construcción de su catedral. En 1883 se colocó la primera piedra y la construcción realmente comenzó en 1885. El progreso inicialmente fue lento debido a la financiación insuficiente y la muerte del arquitecto original.
La iglesia fue una de las primeras en España en incluir una gran cripta románica, que se inauguró en 1911. Pero luego durante la Guerra Civil Española, la construcción se detuvo por completo, y solo se reinició en 1950 (con un nuevo arquitecto una vez más).
El área del claustro se completó finalmente en 1955 y la fachada en 1960, pero el proyecto no se consideró terminado hasta 1993. Fue entonces cuando la catedral fue finalmente consagrada por el Papa Juan Pablo II. El interior de la catedral se considera neogótico y tiene muchas capillas y un museo.
La Catedral de la Almudena tiene una orientación norte-sur, lo cual es notable, considerando que la mayoría de las iglesias cristianas tienen una orientación este-oeste. La catedral fue construida de esta manera para integrarse perfectamente con el Palacio Real, que tiene la misma orientación. La catedral fue recientemente el sitio de la boda del Rey Felipe VI (que era príncipe en ese momento) con Letizia Ortiz Rocasolano el 22 de mayo de 2004.
Qué ver en la Catedral de la Almudena
El interior luminoso de la Catedral de la Almudena se basa en el estilo gótico, pero moderno y modesto en comparación con la mayoría de las catedrales españolas. Recientemente se revelaron sus vidrieras de “arte pop” como copias.
El interior es excepcionalmente moderno y cuenta con capillas y estatuas de artistas contemporáneos, en estilos heredados. Verás representaciones desde renacimiento histórico hasta decoración “pop-art”. La capilla del Santísimo Sacramento presenta un mosaico del conocido artista Marko Ivan Rupnik.
Aunque carece del mérito arquitectónico o la importancia histórica de otras catedrales europeas, merece la pena visitar la Catedral de la Almudena por su singularidad, su belleza moderna y su tamaño. Mide 104 m de largo y 76 m de ancho, con una cúpula central de 20 m de diámetro.
El techo de la catedral está hermosamente adornado con muchos colores. El artista Kiko Argüello creo imitaciones de frescos bizantinos que dan al interior de la catedral una presencia colorida imposible de perderse.
Junto a esta explosión de color se pueden ver otras impresionantes obras de arte que añaden al aire imponente de esta iglesia. De particular interés son las puertas de bronce. Estas puertas están adornadas de manera casi increíble. Estas piezas son obra del escultor Antonio Sanguino. Y realmente son una parte imperdible que ver en la Catedral de la Almudena.
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Museo y Cúpula
La Catedral de la Almudena tiene un museo que explica la historia de la iglesia y la archidiócesis de Madrid. Puedes visitar los nuevos mosaicos que decoran la Sacristía de la Catedral y la Sala Capitular. Y luego pasar por el triforio y terminar disfrutando de una vista espectacular de Madrid desde su cúpula.
Es muy bueno que sea posible subir a la cumbre de la catedral porque tiene excelentes vistas. En el camino, subes por el museo de la catedral. Solo sigue las indicaciones hacia el Museo de la Catedral y la Cúpula en la fachada norte, frente al Palacio Real.
A una altura de más de 70 metros, la cúpula ofrece impresionantes vistas del Palacio Real. Además de la Plaza de Oriente, el viaducto y la espectacular cúpula de la basílica de San Francisco el Grande. La galería del Museo, aunque no tan alta como la cúpula, sigue siendo un punto de observación excepcional para ver el Cambio de la Guardia Real el primer miércoles de cada mes en la explanada del palacio.
Exterior
La Catedral de la Almudena no se completó hasta 1993, cuando fue consagrada por el Papa Juan Pablo II. Una estatua de él está allí, justo en frente de la catedral. Esta obra conmemora la vida del papa así como el agradecimiento de la comunidad por la consagración de la catedral. Cuando esta se completó la iglesia estaba relativamente nueva.
A la vuelta de la esquina, en la calle Mayor están las ruinas bajas de Santa María de la Almudena . Estas son las únicas que quedan de la primera iglesia de Madrid. Esta fue construida en el sitio de la Gran Mezquita de Mayrit cuando los cristianos llegaron en el siglo XI.
Justo al final de la colina debajo de la pared sur de la catedral, en la Calle Mayor, se encuentra la cripta neorrománica. Esta cuenta con más de 400 columnas, 20 capillas y finas vidrieras de colores. Fue construida en el siglo XIX, es la sección más antigua de la catedral. Esta alberga una imagen de la Virgen de la Almudena del siglo XVI. Cerca de las excavaciones de la calle Mayor se han descubierto restos de murallas moriscas y medievales.