Ghostbusters
Año:
2016
Fecha de estreno:
12 de Agosto de2016
Duración:
117 min
País:
Estados Unidos
Director:
Paul Feig
Reparto:
Melissa McCarthy, Kristen Wiig, Leslie Jones, Kate McKinnon, Cecily Strong, Chris Hemsworth, Andy Garcia, Michael Kenneth Williams
Distribuidora:
Sony
En un año en que los blockbusters no están rindiendo como debieran (con permiso de Deadpool), aquí llegan las cazafantasmas para cerrar algunas bocas. La verdad es que no sé qué mala pinta tendría o no el trailer al que tanta gente se apuntó a hatear enseguida, porque suelo evitarlos en la medida de lo posible, pero el resultado final es bastante consecuente y divertido, muy fiel al legado de Los cazafantasmas de hace treinta años y el suficiente lavado de cara para, dentro de que un remake pocas veces tiene una justificación más allá de la monetaria, tener cierta razón para existir. Y lo primero y finalísimo, que funciona.
Si el listón de complicidad que tenían Bill Murray, Dan AyKroyd, Harold Ramis y Ernie Hudson estaba difícil de superar, al menos Melissa McCarthy, Kristen Wiig, Kate McKinnon y Leslie Jones están casi al mismo nivel, impactando de lleno con el espectador y demostrado que las comedias de Paul Feig se sustentan sobre todo en un buen dibujo de sus personajes, siendo en todo momento creíbles, cercanos y divertidos. Si bien las pretensiones de una tercera parte de la original Cazafantasmas se fueron diluyendo por discursiones en la forma de enfrentarla y por la muerte de Harold Ramis, Ivan Reitman siguió con el proyecto como productor, consiguiendo que el director de Freaks and Geeks, La boda de mi mejor amiga o Espíasdiese una vuelta de tuerca a la franquicia. La idea de un blockbuster enteramente protagonizado por mujeres (aunque disfrutable para ambos géneros) en una época en que la lucha por la igualdad de oportunidades en el cine esta cada vez más candente estaba tardando en aparecer. Si bien tenemos ahí el reclamo de Chris Hemsworth como redefinición de aquella secretaria tan particular de los originales cazafantasmas (uno de los puntos más cómicos de la nueva película, la verdad), las cuatro protagonistas se bastan solas para sustentar sin problema alguno la película. La historia, que poco tiene de novedoso y mucho de reciclado, al menos aporta ciertos detalles y guiños que satisfarán a los fans de la película de 1984. Pero además aspira a conquistar a una nueva generación, gracias a un humor lo suficiente liviano para llegar a un gran espectro de gente pero no tan estúpido como para cabrear al más sibarita.
Si se dejan los prejuicios a un lado, y atendiendo a que, quitando la nostalgia de por medio, Los cazafantasmas de Ivan Reitman, aunque muy divertida y entrañable no dejaba de ser una película comercial para pasar el rato (y ojo, lo dice alguien que la disfruta como un enano), no podemos exigirle otra cosa a la de Paul Feig. Si bien puede doler un poco esa versión alternativa de la mítica canción de Ray Parker Jr., Cazafantasmas supone algo más que la 'versión femenina' de la original, sino una actualización de patrones a las convenciones actuales con el espíritu vivo para que se pueda sentir digna de llevar el nombre que lleva. Quizás, por pedir, podríamos decir que al malo de la función de falta algo de carisma e impacto, no se siente verdaderamente temible, pero teniendo a las cuatro cazafantasmas (mi favorita es Holtzmann, por cierto) y su torpe pero adorable secretario, tampoco se echa en falta. Para pasar el rato y olvidarse del caluroso verano, nada mejor que este refrescante y divertido ectoplasma. Porque ya he dicho que es la mar de divertida, ¿no?
7/10