- ½ kilo de cazón.
- Un vaso de agua.
- Un vaso de vinagre.
- Una cucharadita de pimentón dulce.
- Sal gruesa.
- Orégano seco.
- Harina de trigo especial para frituras.
- Comino molido.
- 4 dientes de ajo.
- 4 hojas de laurel.
- Aceite de oliva virgen extra.
Lo primero que hacemos es limpiar el pescado, lo más sencillo es decirle al pescadero que os lo limpie y os lo ponga para freír. Luego una vez en casa le dais un nuevo repaso por si le han dejado algún huevo o alguna telilla y se la quitáis. Ahora llega el momento de preparar el adobo, echáis el pescado en un bol y le añadís un puñado de sal, los cuatro ajos sin pelar, pero un poco golpeados, el orégano, el comino, el pimentón dulce y las hojas de laurel rotas. Lo tapáis y lo metéis a la nevera un mínimo de ocho horas, aunque es mejor de un día para otro.