Esta cazuela de boquerones no la tenía prevista, pero al ver los boquerones tan grandes que había en la pescadería no me pude resistir a comprarlos, una vez comprados pensé en hacerlos rellenos, como al final se complicó un poco la mañana me fue imposible hacerlos así porque necesitaba más tiempo y al final después de ver lo que había en la nevera resultó esta cazuela de boquerones sobre un lecho de patatas, cebolla tierna, pimiento y tomate.
En principio y si hubiese dispuesto de más tiempo habría puestos todo los ingredientes en crudo en la fuente de horno, excepto los boquerones, y lo habría horneado hasta que las patatas y la cebolla estuviesen listas, pero como el horno tarda bastante más he optado por hacerlo todo antes en la sartén, montar la cazuela y hornearla unos 10 minutos después todo junto.
El resultado como podéis comprobar es muy bueno, con un sabor fantástico y como es sin espinas seguro que a los niños les gusta.
Para hacerlo vamos a necesitar:
800 gramos de boquerones grandes, abiertos por la mitad 2 patatas grandes 1 cebolla tierna grande o dos medianas 3 pimientos italianos 1 tomate grande 2 dientes de ajo Un poco de pan rallado Sal, aceite de oliva virgen extra. 1 copa de vino blanco 1 copa de agua (aprox 100 ml)
Pelar las patatas y cortarlas en rodajas de aprox 2-3 mm., freír en abundante aceite hasta que estén doradas, pasar al fondo de una cazuela que pueda ir al horno (yo he usado una sartén que se le quita el mango y puede ir al horno), salar
Cortar en rodajas los pimientos y proceder de la misma manera. Una vez que tengamos los pimientos ya fritos dejamos en la sartén solo un poco del aceite y pochamos la cebolla a fuego lento, la cebolla la cortamos en rodajas finas, para que se haga mejor le añadimos un poco de sal, cuando empiece a tomar color la pasamos a la cazuela. En el mismo aceite doramos un poco el tomate cortado en trocitos, solo le damos unas vueltas a fuego fuerte para que pierda un poco de agua, lo ponemos también repartido en la cazuela.
Salamos los boquerones y los colocamos de forma ordenada sobre la cama de verduras, los espolvoreamos con un poco de pan rallado y distribuimos por encima los ajos cortados en trocitos bien pequeños, añadimos un par de cucharadas de aceite del mismo de freír las patatas, el vino blanco y el vasito de agua.
Introducimos la cazuela en el horno a 190º C con aire y calor primero por abajo durante unos 10 minutos, un par de minutos antes de acabar pondremos el gratinador, servir caliente.
Hay que procurar que el pescado no se nos haga en exceso porque quedaría demasiado seco.