Me acerqué a Missión, el último disco de la Bartoli, con bastante escepticismo, pero a la segunda escucha -durante la primera no le presté mucha antención- me ha dejado sin palabras, es que no sé qué decir. Al margen de toda la parafernalia que rodea el lanzamiento: publicación como libro de tapas duras con artículos de especialistas, novela Las joyas del Paraíso de Donna León, piezas grabadas junto al también mediático Philippe Jaroussky -qué bien casan las voces aunque no contrastan mucho-, aplicación de iPad, portada escandalosa... esta mujer se reinventa a sí misma y consigue uno de sus trabajos discográficos más redondos con un acompañamiento, I Barocchisti y Diego Fasolis, excepcional. Me quito el sombrero, me postro, me arrodillo, beso el suelo, pido el reclinatorio a Joaquim y lo que sea. Je suis épaté, a estas alturas de la película ni se me pasaba por la cabeza que esto pudiera pasar.
Agostino Steffani: Niobe, regina di Teve, (1688) Aria de Niobe : Amami, e vederai... Cecilia Bartoli y Rosario Conte -laúd-.
Amami, e vederai, ch'amor non ha più stral, vibrolli tutti al seno mio per te. In quei tuoi vaghi rai è l'ardor mio mio fatal né v'è fede, che sia pari a mia fé.