En la sociedad actual se calcula, que tras la pubertad, en torno al 90% de las mujeres tienen celulitis en alguna de sus distintas fases. En los hombres la incidencia es mucho menor, en torno al 10%. La celulitis es una modificación del tejido celular subcutáneo, se produce por el aumento de la síntesis y almacenamiento de triglicéridos dentro de los adipocitos. Estas sobrecargas se acumulan formando nódulos que dan el aspecto característico de la llamada “piel de naranja”. Además del problema estético, estos nódulos de grasa pueden producir obstrucción de vasos sanguíneos, retención de líquidos, e incluso dolor al presionar la zona. Las zonas más afectadas son los muslos, caderas, nalgas, cintura, abdomen, cara interna de brazos y rodillas. La celulitis afecta por igual a mujeres gruesas y delgadas, aunque existen claros factores predisponentes: hereditarios, hormonales (pubertad, embarazo, menopausia), psicológicos (depresión, estrés, ansiedad), alimentarios (elevado consumo calórico), sociales (vida sedentaria, prendas ajustadas, exposición directa a fuentes de calor y radiaciones), trastornos circulatorios (varices, irrigación insuficiente), uso de medicamentos (anticonceptivos, corticoides) y determinadas enfermedades (diabetes, trastornos hepáticos y obesidad). El tratamiento global de la celulitis comienza con una serie de medidas preventivas higienico-dietéticas, muy sencillas, pero tremendamente eficaces: -Dieta equilibrada rica en frutas, verduras, cereales integrales, legumbres y fibra. Beber, al menos, 1,5l. de agua al día. -Evitar el exceso de sal, el consumo de alcohol, tabaco y café. Cuidado con el azúcar. -Evitar los factores predisponentes al desarrollo de insuficiencias del sistema venoso y linfático: el exceso de calor por la exposición solar o la cercanía de fuentes de calor directas favorece la dilatación de los vasos sanguíneos; como el uso de prendas ajustadas o tacones altos también perjudican el retorno venoso y la microcirculación. -Además, hacer ejercicio físico de tipo aeróbico (caminar, correr, aeróbic…) mejora claramente la circulación sanguínea. -Dormir suficientemente, vivir una vida serena, regular y saludable también previene la aparición de celulitis. Dependiendo del grado y evolución de la celulitis el tratamiento de elección podrá contemplar el uso de herramientas farmacológicas, estéticas y médicas (cirugía). Sin embargo, a nivel domiciliario el tratamiento tópico con productos anticelulíticos, complementado con nutricosméticos orales, es el más utilizado.
Animaros a seguir estos consejos y estoy segura que notaréis la diferencia. No podemos luchar contra la herencia genética, pero sí modelarla y hacer frente a muchos otros factores, es muy importante no dar la batalla por perdida y reaccionar a tiempo. Gracias Cinti por dejarme compartir este ratito con tus lectoras. Os invito a conocer Farmacosmetica.net, mi espacio de promoción de la salud, cuidados de la piel, el cabello, salud bucodental, infantil… y a visitar mi blog, repleto de contenidos de belleza, cosmética y salud desde la perspectiva de una farmacéutica enamorada de la belleza y la vida más saludables.