El pasado jueves 26 de Junio, aprovechando circunstancias familiares propicias, tuvimos la oportunidad de disfrutar de un evento, organizado por el Club Kviar en La Biblioteca Gourmande, un interesante espacio gastronómico en el barrio del Raval, en Barcelona. Puedes encontrar + info del Club Kviar aquí, y sobre La Biblioteca Gourmande aquí.
La propuesta era un menú elaborado por su chef, Salvador Gámez, un joven cocinero formado en la Escola de Hosteleria de Girona, que ha aterrizado recientemente en este restaurante. La Biblioteca lleva abierta 2 años y medio, y mantiene una filosofía de cuidado de su materia prima, con producto orgánico y ecológico, y con contacto directo con sus productores, a los que se preocupan en visitar, para entender lo que hay detrás y coordinar líneas de actuación. El menú estaba maridado con vinos de Costers del Segre, muy bien seleccionados por Mónica, una brillante sumiller capaz de transmitir su emoción por el vino con sus palabras y sus gestos, lo mima casi de manera obsesiva y, a cambio, lo disfruta al máximo. Una persona muy interesante, sólo por charlar con ella merece la pena la visita a La Biblioteca. Por cierto, un detalle de que creen realmente en lo que hacen: no hay cocina como tal, Salvador cocina delante de un par de barras donde el que quiera se puede sentar, mientras cena, a ver cómo se maneja.
El menú consistió en:
- Ostra de la Bretaña francesa, maridada con Lo Virol Blanc 2012, un vino de Chardonnay, Garnacha blanca, Gewürztraminer y Sauvignon Blanc, del que también disfrutamos en el aperitivo. Poco que decir de la ostra, muy fresca, de sabor suave, un punto menos marino que una ostra gallega, pero disfrutable igualmente.
- Croquetas de pollo de corral al curry: masa muy bien elaborada, en su punto justo de fritura, y con el original toque que le aporta el curry. Aquí cambiamos a un vino tinto, también de Lo Virol, un joven multivarietal con 3 meses en barrica.
Hemos de decir que, pese a que el vino no estaba mal, viendo lo que venía a la mesa, hablamos con Mónica y coincidimos con ella en elegir otro vino, Viern 2009, del que ya os hemos hablado antes en el blog, y que creíamos que encajaría mejor. Como lo definió Mónica, es un vino “afrodisiaco”, y nos iba a permitir disfrutar más de los placeres por venir.
- Terrina de ternera con hígado de pato y pistachos. Iba acompañado de salvia del Montseny.
- Bacalao a la “llauna” con hummus del Raval. Iba acompañado de ajo tostado, en su punto perfecto. El bacalao también estaba muy bien conseguido, con un punto salado nada molesto. A todo esto, el Viern 2009 se iba afianzando, abriendo, y sintiéndose cada vez más cómodo con los platos que nos iban trayendo.
- Chuletón madurado con pimienta sichuan. Mónica nos explicó que el chuletón lo maceran durante 60 días. El resultado una carne sabrosa, tierna, jugosa, en su punto. Nosotros tomamos una ración, pero como curiosidad, decir que lo tienen en carta en ración de kilo (y más grandes) para compartir.
Hasta aquí los platos principales del menú degustación, una propuesta muy equilibrada en cuanto a sabores y cantidades, suficiente sin resultar excesiva, y un buen muestrario de la creatividad de Salva. El postre también estuvo a la altura de las circunstancias:
- Fresas con queso mascarpone y miel artesana, servidas en tarrina, y maridadas con un cava de Ferret Guasch, un Brut Nature Reserva, de burbuja muy elegante, y con un intenso aroma de crianza, a tostados y bollería que complementaban perfectamente con el postre.
El menú maridaje tiene un precio de 50 euros por persona en carta y, como ellos mismos dicen, “explica la esencia de La Biblioteca Gourmande”. Nosotros, por ir con Club Kviar, pagamos sólo 39 (el Viern aparte, claro) por persona, un muy buen precio para un menú equilibrado, delicioso, bien presentado y muy bien servido. Un sitio muy recomendable, en el que, sin duda, repetiremos, y recomendaremos a quien nos quiera escuchar.
Por cierto, me dejaba una mención especial: no pidáis su pan con tomate…es totalmente adictivo !!