Ayer decidí abandonar momentáneamente mi retiro vacacional en el campo y bajar a desayunar a Ibi. En el bar me encontré a Rosa, una lectora y comentarista habitual, quien, medio en broma medio en serio, me dijo: "Ché, a ver si acaban pronto las vacaciones y nos pones algo interesante en el blog, que estos últimos días ...".
Estoy seguro de que Rosa me quiere bien y respeta mis días de descanso, pero no es menos cierto que en agosto también encontramos motivos para la reflexión y el análisis, noticias o circunstancias que, si no se comentan ahora, pierden actualidad. Así que voy a referirme brevemente a alguna de ellas.
Lo que no me parece correcto es lanzar titulares en los que, indirectamente, se responsabiliza a los bomberos de la situación. Creo que los bomberos tienen todo el derecho del mundo a no hacer horas extras, especialmente si con esta práctica irregular y sistemática lo que se evita es contratar a más personal, manteniendo el servicio en precario. Y desde luego, lo que no tiene nombre es la actitud morosa de la Generalitat, que adeuda al Consorcio 8 millones de euros, lo que supone su axfisia financiera.
El canon que percibirá el Ayuntamiento tiene dos partes, una primera fija correspondiente al valor de la edificación y que asciende a un mínimo de 4,8 € por metro cuadrado arrendado) y otra variable correspondiente al volumen de negocio, que asciende a un mínimo del 1% del volumen de negocio inicialmente estimado. Bien, dudo que haya nadie que en menos de 15 días pueda recopilar toda la documentación que necesita para concursar, pero haré lo posible por facilitarle la tarea dejando aquí enlazados el Pliego de Cláusulas Administrativas, el Pliego Técnico y el Informe aclaratorio (todo un compendio de errores ortográficos, por cierto).