Cerrados (o casi) por vacaciones

Por Francisco Enrique Perez Ruiz-Poveda @PATXIPE

Ahora resulta que hemos encontrado la solución para que los partidos no discutan: Que se vayan de vacaciones.
No se habrá arreglado nada, pero estos días no están preocupados. Desaparecen una semana, y este vecino del mundo se los imagina enchufados a la toma de corriente más cercana recargando sus pilas, aunque la realidad seguro que será otra.
Y es que, en teoría,  deben de estar preocupados por el país, por los nacionalistas, por los no nacionalistas, por las fronteras dentro del propio país, por las fronteras exteriores, por el paro,  por las tarjetas negras, por la corrupción en general, por la corrupción en particular, por la crisis… pero, cuando llegan las vacaciones, todos se ponen de acuerdo, y al grito de maricón el último (que en este caso no es una exclamación sexista, sino algo coloquial para tener una excusa para irse más rápido todavía), pues se van, y aquí paz y después gloria.
¡Y nunca mejor dicho! En unos días cuya excusa, razón o motivo en realidad sería religioso, por lo que este vecino comprendería que cogieran fiesta los del PARTIDO POPULAR, y CIUDADANOS, por, en teoría, ser católicos de los de toda la vida. Pero tanto el PSOE, como PODEMOS, o IZQUIERDA UNIDA, que se acercan más al color rojo, del infierno, que al azul, del cielo, deberían de aprovechar estos días para decirse las verdades del barquero (que por cierto, y dicho sea de paso, nunca he comprendido el dicho), y apurar esos caminos que les pueden unir que parece que muchos vemos, menos ellos.

Estos días, en los que misteriosamente han desaparecido todos, me recuerdan a la empresa en la que trabajé más de veinticinco años, y que cada vez que llegaba la época vacacional intentaban “hacerte ver” que eras vital para el devenir del negocio, haciéndote sentir culpable, e intentar que ni cogieras vacaciones, ni pagártelas.


Ellos, los jefes, la empresa, en teoría practicaban con el ejemplo, lo que ocurre es que, en versión oficial, se iban de viaje de negocios, con la familia, y volvían muy morenos. Que cada uno piense lo que quiera… La otra versión oficial, la de ahora, puede ser, que los partidos estarán, en cierta manera, reunidos preparando estrategias, y velando en la distancia por todos nosotros. Como en la religión, aquí también es cuestión de fe. Aunque la realidad sea, quizás, que los políticos estén cerrados por vacaciones, y a muchos de nosotros nos han cerrado, segandonos las ilusiones.*FOTO: DE LA RED