Aún los podremos observar durante los primeros días del mes de junio. Es la última oportunidad de contemplarlos en su precioso plumaje nupcial hasta la próxima temporada, y realmente el hecho de que la mayoría de los ejemplares presente este plumaje nupcial nos indica que se trata de aves reproductoras y no de aves inmaduras.
Las aves de estas fechas tan tardías probablemente proceden de las zonas de invernada situadas más al sur. En una hipótesis extrema pero posible, si se dirigieran a criar en el extremo norte de su área de reproducción estaríamos hablando de un viaje de prácticamente 14.000 km. Impresionante
Junto a estas tres especies en zonas favorables es habitual que en estas fechas se observe también algún que otro archibebe común, como estos de la ensenada de Llodero de hace sólo dos días.