En una de mis incursiones por Cantabria, hace unos meses, volví por donde Andrés en el Atropá, y vi que tenía un aparatejo nuevo al lado del grifo de cerveza, con el logo de Guinnes.
Y empecé a recordar la pila de pintas que tomé al lado del gran Bruno, en la ya desaparecida cervecería El Grifro de la plaza de las cervezas.
Le pregunté que era ese aparato y me dijo que era para preparar la cerveza Guinnes Surger. Es una placa con ultrasonidos y la lata especial Guinnes Draught pero sin la bola, por lo que no lleva gas, y la espuma se crea con los ultrasonidos.
Algo curioso la verdad, así que no pude evitar decir otra vez "Dame una pinta de Guinnes".....
¿Pero para que lo haría? Ains. Esto no es lo que era. El sistema es chulo, está bien, pero la cerveza ya no sabe a Guinnes, corta de sabor, de aroma, de cuerpo, de todo.
Lo único que merecía la pena es el aspecto que tenía.
Paso, no quiero seguir, pero esto no es Guinnes.
Me quedo con los recuerdos de esas pintas, y las conversaciones con Bruno.