Cervezas que gustan al planeta

Por Ne0bi0 @buenosviajeros

A inicios de este año, los campos de Jaén se convertían en la casa de acogida de la primera planta cervecera cero emisiones de nuestro país y la más grande de Europa. Basada exclusivamente en energías renovables de origen solar y térmico, desde la fábrica salen ya cada día más de un millón de cañas de cerveza producida únicamente con la potencia del sol de Andalucía y la biomasa de un clásico recurso local: el olivo.

La compañía encargada de impulsar este proyecto es Heineken España, que se ha comprometido a evitar la emisión a la atmósfera de 4.000 toneladas de CO₂ anuales, el equivalente al consumo energético de una población como Martos (Jaén), compuesta por 6.650 hogares. "Jaén supone un gran paso en nuestra apuesta por la sostenibilidad, la lucha contra el cambio climático y el beneficio de los agricultores locales", recordaba Guillaume Duverdier, presidente de Heineken España, durante la inauguración de esta planta pionera.

De esta manera, España se ha posicionado como un mercado a la vanguardia en la puesta en marcha de este tipo de iniciativas, claves para la implementación del programa de reducción de dióxido de carbono Drop the C y la estrategia global EverGreen. Se trata, no obstante, de un proyecto que ha sido posible gracias a una ambiciosa inversión de 1,4 millones de euros, en consonancia con el compromiso que Heineken ha adquirido en los últimos años para reducir a cero las emisiones en producción nacional antes de 2025.

Toda la cerveza Cruzcampo elaborada en Jaén se hace con energía 100% renovable

El sector cervecero lleva tiempo adaptándose a las necesidades ambientales del planeta a través de la implantación de líneas de producción más ecológicas, pero nunca antes una multinacional de cerveza se había propuesto conseguir la neutralidad en todas sus plantas en España. Siguiendo esta línea, la planta cuenta con una instalación de energía térmica renovable nueva que ofrece -en colaboración con la empresa de gestión de residuos Biosteam- un sistema alternativo de producción de vapor industrial que generará 12.600 MWh de energía renovable a partir de 6.000 toneladas anuales de la poda de olivos, proporcionando el 70% de la electricidad para transformar la cebada en este líquido tan apreciado en nuestro país. El 30% restante procederá de la energía eléctrica producida por la planta fotovoltaica inaugurada el pasado mes de septiembre en El Andévalo, en Huelva.

Sin embargo, esta apuesta por la sostenibilidad no es nueva para Heineken, ya que la empresa cervecera lleva 6,4 millones de euros invertidos en Jaén en los últimos tres años, dando trabajo a más de 120 profesionales y generando casi 5.000 empleos, ocho de cada diez en la hostelería. Además, a nivel nacional, la compañía ha fomentado iniciativas como la plataforma social Talento Cruzcampo o el movimiento # FUERZABAR, en el que Heineken ha invertido más de 150 millones de euros en 2020 para apoyar a la hostelería, uno de los colectivos más afectados por la crisis del co-ronavirus.

En esta nueva historia protagonizada por la planta cero emisiones -referente nacional de calidad en la industria alimentaria- y la provincia de Jaén, el concepto de la economía circular cobra especial relevancia, ya que la compañía suma la revalorización de la poda de los olivares a su trabajo por reciclar y reutilizar el 95% de los residuos de producción, así como a los proyectos de compensación hídrica llevados a cabo en enclaves tan conocidos como el parque natural de Doñana. Con todo, se trata de crear cervezas que no solo le gusten al mundo, sino también al planeta.

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