Hoy traigo unas cestitas cujientes de burrito. Es un plato sencillo con el que sorprenderás a los invitados por el contraste de texturas y sabor. ¡Sabrosísimos y originales!
Como sabréis los que me leéis, estoy con una nueva dieta por lo que no puedo comer el pan, lo demás sí. Pero esta es una receta de hace unos meses que hice para mis amigos que invité a cenar y, ¡Quedaron encantados!
¡Que nerviosa estoy! El lunes comienzo a trabajar, no quiero contaros nada hasta que llegue y firme el contrato, porque estoy como que no me lo creo. Por ello y porque además tengo el examen el día 9 estoy de los nervios y mi estomago funciona como una centrifugadora. Que rabia cuando estás bien y con ganas y todos los nervios te van al estomago. Pero bueno, en unas semanas que ya habré empezado a trabajar y que, además habré pasado el examen, estaré mucho más tranquila.
Además a pesar de la dieta, ando haciendo recetas sin esos ingredientes para que podáis disfrutarlas y, en cuanto acabe mi examen, me hundiré en mis libros de recetas para cocinar, que es lo que más me gusta.
Ingredientes:1/2 kg carne picada mixta1 paquete queso cheddar en lonchas o rallado1 lechuga iceberg1 sobre de polvos para buritofajitas pequeñas
Elaboración:
Pon la carne picada con un poco de aceite en una sartén onda. Tienes que ir aplastándola con la cuchara de madera poco a poco para que no se hagan bolas y quede la carne desmigadita.
Dorala a tu gusto pero lo mejor es dejarla tostadita. Pon el horno a precalentar a 180º
Luego añade los polvos para burritos y echa agua. Deja que se vaya haciendo a fuego bajo medio hasta que espese.
Mete las fajitas pequeñas en el molde de cupcakes. Haz primero como un piquito para abajo para meterla y luego la colocas ahí.
Para que se queden abiertas y luego puedas rellenarlas tienes que poner una bola grande de papel albar y doblar los estremos. Mételo 5 minutos hasta que veas que todos los bordes se doran. Luego cogelos sin quemarte y les das la vuelta ya directamente en la bandeja de horno para que se hagan por abajo.
Como ves conservan la forma y están super crujientes.
Pon la carne que ya habrá espesado en un plato ondo.
Echa el queso cheddar y mézclalo todo bien. Luego se derretirá con el calor de la carne.
Coloca en cada cestita un poco de la lechuga.
Luego añadele la carne.
Como ves quedan unos aperitivos muy graciosos con muchas formas y que están riquísimos.
Son un aperitivo ideal o un plato principal en más cantidad para los invitados.