Carme Chacón, dirigente del PSOE y de ese socialismo catalán que imita a CiU y ERC en su sueño de olvidar a España, acaba de anunciar que se irá un año como profesora de Derecho Público a un college-universidad mayoritariamente de hispanos y para hispanos, el Miami Dade.
Con 175.000 alumnos, y siendo el mayor centro de Florida, su presupuesto anual es de 643 millones de dólares, 486 millones de euros, mientras que sólo la Complutense, con la mitad de los estudiantes, dispone de 516 millones de euros: estupefaciente.
Es pública, pero cada alumno debe aportar unos 22.500 euros por curso. Numerosas clases se dan en español, muchas más que en las universidades catalanas.
Chacón debería aprender allí el valor del bilingüismo en toda la educación y el peso del Gobierno Federal frente al de Estados como Florida, nada nacionalistas.
Obsérvese la composición del alumnado: el 68 por ciento es hispano; el 19, negro; el nueve anglosajón; luego, distintas minorías.
Sin embargo, Florida tiene un 75 por ciento de blancos anglosajones: esta mayoría acude a otras universidades.
Pero la de Dade, cuyo rector, Eduardo J. Padrón es socialdemócrata al estilo de Obama, tiene una enorme importancia para Latinoamérica: forma a numerosos líderes, papel que podrían ejercer también las universidades españolas si tuvieran un mínimo prestigio.
Dade no es una universidad de élite, como pretende difundir el entorno de la exministra, ni destaca por su nivel académico, o el valor de sus titulaciones, sino que es un ejemplo de “melting pot”, crisol integrador alrededor del español y del inglés, alejado de localismos, al contrario de los nacionalismos y socialnacionalismos del PSC.
Chacón traicionó la E, el sustantivo Español del PSOE, en el Parlamento cuando se abstuvo sobre el “derecho a decidir”, base del independentismo nacionalista aceptado por el PSC.
¿Aprenderá ahora esta hispana en Miami la importancia de la historia de España, descubridora de Florida, y del bilingüismo, para exigirlo en las escuelas catalanas?
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SALAS