- 300 gramos de champiñones.
- ½ pimiento rojo.
- ½ pimiento verde.
- ½ cebolla pequeña.
- 1 diente de ajo.
- Media lata de cerveza.
- Aceite de oliva.
- Sal y pimienta.
Lo primero que hacemos es lavar los pimientos y picarlos. Echamos un chorro de aceite en la sartén y ponemos los trozos de pimiento. Mientras comienza a freírse a fuego medio, teniendo cuidado de que no se quemen, vamos picando la cebolla y el ajo y se lo añadimos a la sartén, salpimentamos la verdura.
Mientras se cocina la verdura, vamos lavando y cortando los champiñones en láminas, cuando vemos que la cebolla está transparente añadimos los champiñones y esperamos a que suelten todo el agua. Cuando ya están casi cocinados añadimos media lata de cerveza, subimos el fuego y esperamos a que el alcohol se evapore, lo que suele tardar unos cinco minutos. Si veis que los champiñones han soltado mucha agua y queréis espesar la salsa emplear un poco de maicena, si no como me ha ocurrido a mí, los sacáis a un plato y ya están listos para comer.