Champú anticaspa con aceites esenciales de romero, geranio y árbol del té

En este artículo me voy a centrar en como ayudar a combatir la caspa y no tanto en su origen y tipos, que para eso están los dermatólogos que son los primeros profesionales que debemos de acudir ante este problema.

En este artículo voy hablar de:

• Nociones sobre los tipos de caspa
• Como limpia un champú
• Champús anticaspa industriales, muy agresivos al cuero cabelludo
• pH de la piel (fisiológico)
• Propiedades de los aceites esenciales utilizados
• Receta de un champú anticaspa con aceites esenciales

No entraré en disquisiciones si se trata de descamación o caspa, ya que es un tema que se aleja totalmente de este artículo que trata, de un remedio muy eficaz que te voy a proponer a este molesto y antiestético problema.

Básicamente hay dos tipos de caspa:

• Caspa seborreica o grasa
• Caspa seca

Se diferencian tanto en el aspecto de sus escamas como en los síntomas que producen, siendo las caspa seca mas fina y seca y produciendo los típicos picores y la grasa produciendo escamas más grandes tipo placas y pudiendo haber enrojecimiento.

Los aceites esenciales junto con el champú que te voy a proponer van a producirte un gran alivio y van a paliar las manifestaciones de la molesta caspa.

¿Pero como limpia un champú?

Voy a explicártelo de forma breve y sencilla. De esta forma te podrás escoger un champú no agresivo para la piel

Todos los detergentes (productos de limpieza) tanto los destinados a la piel como a uso doméstico tienen la misma molécula que se encarga de eliminar la suciedad. Estas moléculas son los tensioactivos.

Estas moléculas en forma de chupachups se adhieren a la grasa arrastrando así la suciedad. En función del producto que se quiere formular, tendrán más o o menos poder detergente (de lavado), es decir de arrastrar la grasa para eliminar la suciedad que se adhiere a ella.

De forma que los productos pensados para lavar la ropa, u otras superficies inertes tienen mucho poder de lavado y arrastran de forma muy eficaz la grasa. Esta gran eficacia para arrastrar la grasa se lo otorga el tipo de tensioactivos utilizados (llamados aniónicos).

Estos tensioactivos no son los idóneos para nuestra higiene, ya que afectarían mucho a nuestra necesaria grasa natural. Grasa que produce la piel para protegernos y evitar la deshidratación. Es decir afectaría a nuestro manto hidrolipídico o emulsión epicutánea, nuestra crema cosmética natural (producida por las glándulas sudoríparas y sebáceas de la piel).

Por tanto los productos de higiene que vayan para la piel deben tener tensioactivos capaces de limpiar pero con no demasiado poder detergente (limpieza), ya que sino serian muy agresivos para la piel afectando mucho a la necesaria grasa natural producida.

¿Qué solución nos dan la industria cosmética ante este problema de caspa?

La respuesta es evidente, los champús anticaspa industriales. Estos champús contienen unos t ensioactivos muy agresivos ya que no están diseñados en arreglar el problema de base, sino solo en producir una li mpieza muy eficaz, pero a costa de agredir a nuestro cuero cabelludo, ya que arrastran de forma muy eficaz la caspa, pero también la necesaria grasa de la piel. Por tanto son productos pensados para la limpieza eficaz y no para el tratamiento del problema.

Estos champús anticaspa industriales, suelen funcionar al principio durante algún tiempo, pero al ser tan agresivos con el cuero cabelludo, suelen producir el llamado efecto rebote, es decir acaban agravando el problema.

Yo desaconsejo utilizar este tipo de champús al ser tan agresivos con la piel.

Otra cosa que debemos fijarnos en nuestro champú como gel para el cuerpo es que tenga un pH 5,5. Nuestra piel tiene un pH ligeramente acido 5,5, y por tanto todo producto que se aleje de este pH a la larga afectará negativamente a nuestra piel.

Por tanto para nuestra fórmula partiremos de un champú:

• Neutro, que no sea de tratamiento (a no ser que lo prescriba el dermatólogo)
• Con un pH 5,5 o lo que es lo mismo que indique que tiene un pH fisiológico

Componentes de la fórmula:

• 250 ml Champú neutro con ph 5,5
• Aceite esencial de romero (15 ml= 300 gotas)
• Aceite esencial árbol del té (5 ml = 100 gotas)
• Aceite esencial de geranio (10 ml= 200 gotas)

Propiedades de los aceites esenciales utilizados. Aceite esencial de romero.

• Rico en antioxidantes
• Tiene propiedades antiinflamatorias, estimula la circulación sanguínea del cuero cabelludo y por tanto proporciona oxigenación adecuada a los folículos pilosos
• Es antiséptico y antifúngico
• Ayuda al picor y la descamación producida por la caspa

Este aceite será la base de mi fórmula, ya que de todos los utilizados es el que tiene mas propiedades para el cabello y contra los efectos de la caspa.

Aceite esencial árbol de té

Gran antiséptico de amplio espectro y por tanto, eficaz contra muchos de los microorganismos, bacterias, hongos...

Aceite esencial de geranio

Gran regulador de las glándulas sebáceas, tanto por exceso como por defecto. Esto quiere decir que regulará tanto el exceso como el defecto de producción de grasa de nuestras glándulas sebáceas.

Elaboración

Una vez escogido nuestro champú neutro (sin tratamiento) y de pH 5,5, solo deberemos incorporar las gotas de los aceites esenciales y agitar el champú para conseguir una buena mezcla con los aceites y ya estará preparado para su uso.

Esta receta no se trata de un producto milagroso, ya que el problema de la caspa es muy complejo, y siempre y ante todo debemos acudir al dermatólogo, pero si te va ayudar mucho a mejorar todos sus síntomas, producción de caspa, picores...etc

Yo que padezco este problema te puedo garantizar que desde que utilizo esta fórmula, tengo el cabello con mucha mas vitalidad, y se ha reducido mucho las molestias de la caspa