Charles Dickens y la época victoriana (2)

Publicado el 05 febrero 2012 por Carm9n @Carmenyamigos

Como continuación de la entrada anterior, nos centramos aquí en la novela victoriana, las obras de Charles Dickens y algunos datos biográficos del gran escritor. 

La novela es la expresión literaria más importante de la época victoriana y es entendida como una forma de entretenimiento. Las librerías de préstamo empiezan a expandirse y los libros se hacen cada vez más baratos  a medida que el siglo avanza. Pero la novela, sobre todo, es un producto de la clase media y se escribe para su entretenimiento.

Mujer victoriana leyendo

Las novelas aparecen en revistas y hay una estrecha relación entre el novelista y el lector. Las técnicas en la producción de libros mejoran y la prensa empieza a ser usada para los libros en general a finales de los años 40. La resina se empieza a utilizar en la producción de papel y la llegada del ferrocarril ayuda a la distribución. La gente empieza a comprar libros cuando viaja en los nuevos ferrocarriles. 
Al comienzo de la época victoriana la novela se ve como de categoría inferior a la poesía pero poco a poco la novela va ganando popularidad y más y más gente comienza a leer novelas. Walter Scott ya había contribuido a elevar la novela a altos niveles. Los libros religiosos eran los más publicados y al principio del siglo la novela se encuentra con la dura oposición y crítica del estamento religioso que considera que 'la novela inflama peligrosamente la imaginación con pensamientos sensuales.'

Circulating libraries a principios de siglo

En la segunda mitad del siglo, sin embargo, la novela se convierte en un género respetable y sustituye al teatro, y no solo se lee en privado sino también en alto en casa o en público. Dickens es uno de los escritores que suele leer algunas de sus novelas frente a un auditorio.

Las novelas de la época victoriana se pueden dividir en varias categorías: novelas que están perdiendo popularidad y que se centran en la vida de las clases altas y la aristocracia, novelas de misterio muy populares ente las clases más bajas, novelas sobre la clase media menos sensacionalistas que las anteriores, y también novelas en las que los escritores ponen la pobreza, la miseria, la brutalidad y violencia, la diferencia entre los ricos y los pobres bien a la vista, despertando la simpatía de la gente hacia aquellos que sufren.

Y la figura preeminente en la novela del siglo XIX es, sin duda, Charles Dickens. 

Casa natal de Dickens en Portsmouth

Charles Dickens nació en Portsmouth en 1812. Su padre, oficinista y un hombre de vivo temperamento y de estatus inestable, fue encarcelado en Marshalsea por deudas. Cuando su padre es encarcelado, su madre y sus hermanos y hermanas pequeños se van con él, como era costumbre, y Dickens tiene que vivir solo. La separación de su familia tan solo dura unos cuantos meses, pero nunca olvidará ese sentimiento de soledad ni su tristeza al visitar a su padre en la cárcel.

De niño trabaja en la fábrica de betún Warren pegando etiquetas en botellas por el mísero salario de seis chelines a la semana. Y esta experiencia deja una profunda huella en él. En David Copperfield y en Grandes esperanzas menciona el almacén de betún. 

Fábrica de betún Warren

Dickens estuvo dos años escolarizado en Hampstead, en donde le enseñaron taquigrafía. Después de intentar sin éxito ser actor, se decidió por el periodismo y trabajó para algunos periódicos. En estos trabajos demostró vitalidad y que era un hombre de acción. Y empezó a publicar sus primeros trabajos. Sketches de Boz y Los papeles póstumos del club Pickwick;  y de ahí en adelante un libro tras otro, por entregas. Oliver Twist, Nicholas Nickleby, La tienda de antigüedades, Barnaby Rudge, Martin Chuzzlewit, Cuentos de navidad, Dombey e hijo y David Copperfield son las publicaciones que aparecen  entre 1837 y 1850, quizá la época en la que la vena sentimental se hace más evidente en sus novelas.
A partir de 1850 Dickens sigue experimentando con las formas, los temas y los personajes y publica Casa desolada, Tiempos difíciles, La pequeña Dorrit, Historia de dos ciudades, Grandes esperanzas, Nuestro amigo común y El misterio de Edwin Drood

Niños victorianos

Cuando muere en 1870, Dickens es enormemente popular y con probabilidad el mayor escritor de la época victoriana. Dickens logra crear un mundo imaginario con vida propia e inventa situaciones y personajes de tan ancho espectro como no había sucedido desde Shakespeare. En sus escritos se muestra como un reformador liberal preocupado por los problemas que están surgiendo en las grandes ciudades y la vida de los pobres, especialmente en Londres, como resultado de la Revolución Industrial.

Hemos analizado hasta aquí a Dickens como escritor, y quizá para terminar debamos dar algunas pinceladas sobre su familia...

La imagen que Dickens da en todo momento de su vida, de modo consciente, es la de un escritor familiar, padre de diez hijos y con una familia unida y feliz. Lástima que esa felicidad no sea del todo real. 

Dickens leyendo a sus hijas Mary y Kate

Charles Dickens se casa con Catherine Hogarth en 1836. Catherine tuvo 20 embarazos y sobrevivieron la mitad. Todo parecía ir bien en el matrimonio, con frecuentes mudanzas y viajes, pero unos cinco años después las cosas empezaron a cambiar. Dickens llega a acusarla de lenta, le reprocha sus depresiones postparto, habla entre su conocidos de los problemas de ella con el alcohol (falsos), y la insulta delante de los niños y cualquier otra persona. Algún amigo llega a recriminarle este trato tan cruel.

Catherine Hogarth

El divorcio no estaba bien visto en la sociedad victoriana y menos en una familia respetable como los Dickens, y deciden separarse formalmente en 1858. Ya por entonces Dickens estaba enamorado y viviendo una relación con la joven actriz de 18 años, Ellen Ternan. Tras la separación Dickens se queda con la custodia de los hijos pequeños de la pareja, a los que no anima, sino que más bien casi les prohibe visitar a su madre. Su relación con Ellen Ternan sigue de modo clandestino y dura hasta el fallecimiento del autor. Las luces y las sombras de un genio.

Ellen Ternan

Y para concluir os animo a participar en el Reto Charles Dickens y uniros a nosotr@s en la celebración del bicentenario de esta gran autor, leyendo alguna de sus obras...