Sinopsis:
Todo tiene un precio...El magnate ferroviario Tom Severin es lo suficientemente rico y poderoso como para satisfacer cualquier deseo en cuanto surja. Cualquier cosa, o cualquier persona, es suya. Debería ser sencillo encontrar la esposa perfecta, y desde la primera vez que ve a Lady Cassandra Ravenel, está decidido a tenerla. Pero la bella e ingeniosa Cassandra está igualmente decidida a casarse por amor, lo único que él no puede dar.Todo menos ella ...Severin es el hombre más irresistible y atractivo que Cassandra ha conocido, incluso si su corazón es de hielo. Pero a ella no le interesa vivir en el mundo acelerado de un hombre despiadado que siempre juega para ganar.Cuando un nuevo enemigo casi destruye la reputación de Cassandra, Severin aprovecha la oportunidad que estaba esperando. Como siempre, obtiene lo que quiere, ¿verdad? Hay una lección que Tom Severin aún tiene que aprender de su nueva novia:
Nunca subestimes a un Ravenel.La persecución de la mano de Cassandra puede haber terminado. Pero la búsqueda de su corazón acaba de comenzar ...
Opinión personal:
Parece que ya le decimos adiós a la serie «Ravenel» con la historia de Cassandra y Severin. Y las dos últimas las he tenido que leer en inglés porque siguen sin traducirlas.Las que sabéis de mis gustos ya os podéis imaginar que con las breves pinceladas que nos ha ido dejando la señora Kleypas de este magnate, tenía muchas ganas de que llegara su historia. En su momento pensé que sería pareja con otro personaje —perdón, porque ese dato puede ser un spoiler si no estáis al día con las sinopsis de las entregas— pero cuando conoces más a los dos personajes te das cuenta de que es mucho mejor así y de que, en el fondo, no hubieran hecho buena pareja.
Por si después de leer estas líneas os queda alguna duda quiero adelantar que esta novela me ha hecho pasar muy buenos ratos. Es una novela con el sello de la autora y, por supuesto, recomiendo su lectura. Siempre. Pero, si me paro a pensar, es justo por Tom Severin, porque como novela, me ha parecido bastante cómoda y, sigo pensando, que Lisa Kleypas sabe hacerlo mejor. No obstante, los no-mejores libros de Kleypas pueden ser más recomendables que otro más-bueno de una autora diferente.
Hay dos temas que he encontrado en la novela a los que la autora, de forma sutil o no, añade su granito de arena y no quiero de dejar de comentarlos porque me ha parecido estupendo: el primero es el movimiento que ha traspasado fronteras con mujeres como protagonistas y del que no voy a decir su nombre, pues sería una forma demasiado clara de desvelar información. Me ha gustado mucho, esa defensa que hace y, sobre todo, la actitud que frente a ello tiene el protagonista, no tan solo por lo rápido que responde —quizás de forma egoísta y como única oportunidad que tiene que cazar al vuelo—, sino porque me gusta que un hombre inteligente, racional y poderoso, no de ninguna credibilidad; el segundo, el exceso de curvas de Cassandra.
Cassandra me ha gustado. Una joven con un físico impresionante que se gana más de una envidia social, el éxito social de la temporada, tanto por esas curvas como por esa dote que la acompaña, pero quien está decidida a casarse por amor. Destaco su dulzura, su tesón en conseguir lo que quiere, aún cuando la vida le pone más de una traba, y esa sonrisa que, pese a todo, siempre muestra ante la adversidad.
Pero poco puede hacer frente a Severin.
Tom Severin «es» la novela. Como tanto le gusta a la autora, es un hombre hecho a sí mismo, ha ascendido socialmente a un ritmo vertiginoso y ha pasado de dormir en condiciones infrahumanas a poseer su propio imperio y, con él, gran poder social. Un hombre respetado, envidiado, pero admitido a regañadientes en la sociedad. Aun así, todo se le perdona. Un hombre con carisma y un físico irresistible que conquista página tras página. Una personalidad compleja, con ciertas cualidades y ciertas restricciones, sobre todo sociales, que me ha hecho plantearme en más de un momento si no padece cierto trastorno en concreto.
Me gustan mucho este tipo de personajes, fríos en apariencia, pero tan tiernos.
La trama es sencilla y poco puedo añadir a lo que ya se desvela en la sinopsis que, a grandes rasgos, es un buen resumen de lo que pasa durante la historia.
La relación entre ambos es pura atracción física. Ya sabéis que no soy muy fan de estas novelas y me ha faltado un punto para encontrar ese «cómo» pues la autora, en mi opinión, opta por lo fácil y llena la novela de escenas con personajes secundarios que sí, crean ambiente, nos gustan y disfrutamos, pero restan mucho espacio para que la pareja protagonista se desarrolle como tal y, llegados casi a la mitad del libro, no me estaba enterando mucho de ese «cómo» y eso me daba mucho coraje.
En resumidas cuentas, la autora ha creado, de forma muy ingeniosa, el escenario perfecto para el lucimiento personal de Tom. Porque Tom es un amor, se come la novela, con cada frase y cada gesto ha ido conquistándome, de forma lenta y muy segura. Lo empiezas adorando y lo terminas adorando todavía mucho más. Pocas como la señora Kleypas para conquistarnos de esta forma con sus personajes masculinos.
Y poco más se puede decir. Una novela con una trama, como he dicho, sencilla y nada novedosa, llena de referencias a novelas conocidas, como si hubiera querido hacer un pequeño homenaje a libros que han sido de gran relevancia. Una sucesión de frases preciosas en las que Tom Severin se luce como pocos. Esa heroína que con tesón rompe la armadura del héroe. — Creo que es lo mejor de la novela, cómo vamos desenvolviendo al personaje principal, a quien Cassandra va quitando capas y capas hasta llegar a descubrir quién es—, quizás resulta predecible y, muy posiblemente, la señora Kleypas podría haber aprovechado mucho más a este personaje. Sí, es una queja, porque creo que en sus mejores tiempos era muy capaz de arriesgarse mucho más.
En su conjunto, «Chasing Cassandra» es un buen punto y final a una serie que termina mucho mejor de lo que empezó. Lisa Kleypas es una autora con mucha experiencia, sabe lo que nos gusta a sus lectoras y se aprovecha de ello. A mí ya me está bien, disfruto mucho leyéndola, creo que mi lector ha quedado tan subrayado que parece que el fondo sea más oscuro. He disfrutado tanto de las palabras de Tom, de los sonrojos de Cassandra, de su determinación en las negociaciones. Hubiera preferido que la novela se centrara más en ellos, que se aprovechara más el personaje de Bazzle, saber mucho más de Tom y, quizás, hubiera sido una novela mucho más redonda.Aún así, he disfrutado mucho leyéndola y, por supuesto, la recomiendo. Aunque solo sea para disfrutar de esas palabras, dichas con esa naturalidad ante la que te tienes que quitar el sombrero.
Lisa Kleypas es una escritora a las que toda amante de la romántica histórica ha de leer, es una de las grandes, quizás por eso soy más exigente con sus novelas y eso puede provocar que mis opiniones induzcan a pensar que no estoy satisfecha con el resultado, nada más lejos de la verdad. Sus novelas son sencillas, muy bien documentadas, conoce la época en la que sitúa sus novelas, con pequeños detalles que enriquecen la historia apenas sin que nos demos cuenta, pero su gran secreto es la maestría con la que conquista con sus protagonistas masculinos.
Me ha parecido conocer a unos de los vástagos de Marcus, Lord Westcliff, uno de mis personajes favoritos, así que cruzo dedos para que sea su próxima serie Terminaré con una opinión muy personal, creo que es una traición a sus lectores, que la editorial no haya traducido todavía la novela anterior.
Datos de interés: Ficha de la novela - Ficha de la autora - Web de la autora
Pepa