Es inexacto (y absolutamente innecesario para apuntalar los méritos de Chavela Vargas) sostener ciertas afirmaciones, como se ha venido haciendo en las redes sociales, con el objetivo de argumentar que en Costa Rica la rechazaron por haber sido la primera mujer en el país en cortar su cabello y vestir pantalones. Esto (aparte de que es fácil comprobar que no es cierto) más parece una solución facilona, cómoda para muchos, para explicar una enemistad que provoca sentimientos inusitadamente violentos en varias direcciones.
Difícilmente habría sido Chavela Vargas “la primera mujer” en tener el pelo corto en Costa Rica. En los años veinte, el pelo corto (“á la garçon”) fue muy popular aquí, principalmente en sectores urbanos; para comprobarlo, bastaría con ver las fotos de esos años. Se seguía con fascinación la moda europea y de las grandes ciudades de los Estados Unidos, de donde llegaban revistas y figurines.
Colegio Superior de Señoritas. Álbum del Centenario(1888-1938).
Se ve en la foto a la señora Adela Castro vda. de Gutiérrez (ditinguida alumna
del curso de 1888), junto con la joven Julieta Pinto, una de las mejores
alumnas entre las graduadas de 1938.
En aquella década, Chavela -nacida en 1919-, era apenas una niñita. Hay fotos de Carmen Lyra, Ángela Acuña, Julieta Pinto y otras líderes femeninas con pelo corto, en esa década y la siguiente.
Chavela en México, cuando solía
cantar sola acompañada
de la guitarra
Frida Kahlo. Autorretrato de Pelona,
1940. Colección Museo de Arte Moderno
de Nueva York, íncluido en el libro de
Hayden Herrera, "Frida". Una
biografía de Frida Kahlo, 1985
En cuanto a vestir pantalones, muchas lo hacían ya aquí cuando Chavela era pequeña y ni qué decir en las décadas siguientes.
Así como Chavela se vistió de poncho y trenza, Frida lo hizo repetidamente de india tehuana y trenzó su cabello en forma elaborada.
Nada de esto disminuye ni cambia la imagen de Chavela.