Pavlo Khazan, responsable de las campañas de cambio climático y energía de Amigos de la Tierra Ucrania ha afirmado que “25 años después, la catástrofe nuclear sigue siendo la realidad que sufrimos [1], y el caso de Fukushima demuestra que accidentes de estas dimensiones siguen siendo posibles, y nunca estaremos lo suficientemente preparados. Espero que mi generación, que vio nacer la amenaza nuclear, vea también su final”.
Liliane Spendeler, Directora Ambiental de Amigos de la Tierra España, señaló que “en España también debemos aprender de las lecciones de Chernóbil y Fukushima. Centrales tan obsoletas como Garoña o Cofrentes [2] no pueden mantenerse abiertas por más tiempo. Por ello, Amigos de la Tierra Europa exige un calendario de cierre de las centrales nucleares a través de un proceso transparente de la Comisión Europea que permita sustituir la energía nuclear por fuentes de energía limpia y renovable, acompañada por el ahorro y la eficiencia energética. Una vez más, se ha puesto de manifiesto que no necesitamos la energía nuclear en nuestra vida. Con una política ambiciosa que favorezca las energías renovables y el consumo racional de nuestros recursos podemos conseguir otro escenario”.
Los movimientos contra la energía nuclear están fortaleciéndose en Europa. Durante la conmemoración del aniversario de Chernóbil, han tenido lugar acciones y manifestaciones para recordar las víctimas no reconocidas de la contaminación radiactiva y, a su vez, denunciar a los que niegan los riesgos nucleares.
NOTAS
[1] 25 años después de la explosión de la planta de Chernóbil, el reactor todavía sigue liberando radiación. El escudo de cemento que precinta la zona se está rompiendo, y sólo personal autorizado puede visitar la zona de seguridad de 30km. alrededor del reactor. Millones de personas aún viven en áreas afectadas por la radiación.
[2] Acta de inspección de Cofrentes en la web del Consejo de Seguridad Nuclear de España