Chicuelo

Por Coco
Hace algunas entradas, alguien comentaba que le gustaría leer ideas de cómo llevar el estilo boyfriend, que dicho sea de paso, lleva tiempo asomando la cabecita y que ahora está en papel protagonista total. Así que, ahora que vienen maravillosos días de asueto, vamos a experimentar con ideas varias sobre el que se llama boyfriend. O cómo vestirse con ropa de tu novio o mejor dicho, que parezca de chico.
Vamos a construir looks alrededor de determinadas prendas:
  1. El pantalón: muchas opciones. El baggy tobillero, que va ideal con una blusa de seda + sandalia de tiras anchas + capa corta. El vaquero boyfriend, con dos vueltas en los bajos + mocasines + camisa de cuadros + foulard estrecho + maxichaqueta de punto grueso. Y el pantalón masculino de tiro alto y pata ancha + camiseta de algodón (con estampado o navy) + blazer entalladísima + oxford de tacón.
  2. La camisa: una camisa de aire masculino será aquella de talla superior a la tuya y de corte recto, sin entallar. Funciona muy bien con un pantalón sastre, malmetida en la cinturilla del mismo. Ideal si los puños los llevas remangados a medio antebrazo.
  3. Los zapatos: unos zapatos sin tacón con cordones son fundamentales. Tanto para llevar con vestidos y medias tupidas; con los pantalones masculinos en cualquiera de sus estilos como para ponerte con leggings y blazer.
  4. El reloj: aunque sabéis que no uso, si lo hiciese sin duda me decantaría por una pieza masculina.
Y podríamos seguir: los jerseys, el pijama, ¡¡hasta los calzoncillos!! que nadie diga que no somos aprovechaditas...
Seguid tan guapas.
No se te ocurra: camiseta boyfriend. ¿Cómo? Eso de ponerse la megacamiseta del Okey, con el cuello dado de sí está fenomenal para renovar la pintura de tu casa, pero no para salir a la calle.
Los boyfriend jeans con botas. Lo perfecto es que se queden los tobillos al aire, para eso los remangas.
Genial que te compres unos zapatos masculinos. Pero no te conviertas en Steve Urkel y te pongas los megacalcetines de rombos.
Tampoco te compres una cazadora excesivamente grande. Ese aire tan sumamente ochentero debe quedarse en su década.
* ¡Hoy Maca Gea en nuestra galería!