Uno de los argumentos más comunes a la hora de criticar el desarrollo de la energía solar es la gran cantidad de espacio que estas centrales requieren, y por ello ahora se exploran nuevas opciones de poder desarrollar grandes proyectos sin impactar en el uso de suelo que puede ser útil para otras labores productivas como la agricultura.
Justamente en China, un país que ya enfrenta la escases de espacio de tierra debido a la gran densidad de su población es donde ya se están haciendo grandes avances en esta materia, y ya han conectado la planta flotante más grande a la red de energía local de la ciudad de Huainan, en la provincia de Anhui, una zona conocida por su industria minera y de combustibles fósiles.
La empresa encargada de crear esta obra es Sungrow Power Supply Co, y decidieron construir esta planta sobre una antigua mina de carbón inundada, algo que solo trae más mística a esta central de 40MW.
Pero la construcción de una planta solar fotovoltaica flotante no solo trae beneficios en términos del uso de suelo, ya que además el agua bajo los paneles ayudan a nivelar la temperatura, lo que mejora el rendimiento de producción de energía eléctrico, incluso aumentando la producción sobre un 10%.
Quizás en Chile este tipo de tecnología aún no se hace necesaria, pensando que el norte de Chile tiene grandes superficies de desierto que hasta ahora no están destinadas a usos productivos.
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