- Limpiar los chipirones, cortar en rodajas gruesas y reservar.
- En una cazuela poner un buen chorro de aceite de oliva, cuando esté templada añadir la cebolla cortada en trozos pequeños, bajar el fuego y dejar que se haga lentamente, no tiene que dorar.
- Añadir el tomate frito y el pimentón, remover para que se integre y verter los chipirones.
- Poner a punto de sal y añadir agua hasta que cubra, dejar cocer a fuego medio unos 15 minutos.
- Puedes acompañar de arroz blanco y tendrás un plato completo.
Con los chipirones no se si te pasa como a mi, que me da pereza ponerme a limpiarlos pero después cuando los comes, están tan ricos... Ya los venden congelados limpios en trozos pero a mi no me resultan igual de ricos... No se. El caso es que con esta salsa que no tiene nada, casi nada, están de muerte, toma nota.