Nombre científico
Chloraea magellanica.
Origen
Patagonia.
Clima
Frío y húmedo. Habita en pastizales cercanos a los bosques andino-patagónicos y en bordes de lagos y ríos, desde Neuquén hasta Tierra del Fuego.
Descripción
Planta terrestre, perenne, vivaz, con raíces muy engrosadas. Posee hojas lanceoladas, de 15 a 20cm de largo, en una roseta basal, y un escapo floral folioso con hojas más pequeñas y abrazadoras. Las flores son blancas verdosas, con líneas grises formando un entramado, y un labelo con estrías negras muy marcadas. En el ápice del escapo están agrupadas de 3 a 10 flores. El fruto es una cápsula con miles de semillas muy pequeñas.
Suelo
Húmedo y ácido.
Usos
En regiones frías, puede cultivarse en macetas, parques o jardines. Durante los períodos fríos pierde las hojas y luego vuelven a rebrotar. Se la puede usar como flor cortada. En la Argentina crecen varias especies del género chloraea, que son aptas para cultivar en regiones frías y húmedas y poseen flores muy curiosas y de variados colores.
Cuidados
Dado que es una planta vivaz, hay que recordar dónde se la plantó para no-dañarla cuando no se ve la parte aérea (otoño-invierno). Crece muy bien a pleno sol o a media sombra en suelos húmedos. Suele ser atacada por pulgones.