Con tan solo dos ingredientes os presento un postre delicioso y muy romántico ¿no os lo parece? Aprovechad las fresas que están en su época álgida, con su mejor sabor. Si queréis sorprender esta es vuestra receta.
Preparación: Fundir el chocolate al baño maría. Mientras vamos lavando las fresas y les cortamos una rodajita por la parte más ancha (es lo que nos servirá de base). Pincharemos la fresa, por donde hemos hecho el corte, con la brocheta y rebozaremos la fresa por el chocolate fundido. Pincharemos la brocheta en la rodaja de fresa que hemos cortado. Enfriar en nevera.