Ficha:
Título Original: Chronicle.
Director: Josh Trank.
Guionista: Max Landis.
Intérpretes: Dane DeHaan, Alex Russell, Michael B. Jordan, Michael Kelly, Ashley Hinshaw, Anna Wood, Joe Vaz, Luke Tyler, Matthew Dylan Roberts.
Productores: John Davis, Adam Schroeder.
Fotografía: Matthew Jensen.
Música: Varios Artistas.
Montaje: Elliot Greenberg.
País: Estados Unidos.
Lugares de rodaje: Sudáfrica, Canadá, Estados Unidos.
Año: 2.012.
Duración: 85 minutos.
Edad: No recomendada para menores de 16 años.
Género: Acción, Ciencia Ficción, Drama, Fantástica, Suspense.
Distribuidora: Hispano Fox Film, S. A.
Estreno: 02-03-2.012.
WEB Oficial: Web Oficial de la película en España.
Espectadores: 257.518.
Recaudación: 1.613.578,50 €.
Calificación: 6,150.
Sinopsis:
Tres jóvenes se ven expuestos a una misteriosa sustancia en el bosque, y como resultado, empiezan a desarrollar increíbles poderes. Trabajarán juntos como diversión para pulir sus habilidades, hasta que una serie de problemas personales los empezarán a poner unos contra otros.
Crítica:
02-03-2.012 – JOSU EGUREN
Yo, superhéroe
Enlatada para encajar en el género del 'found-footage', del que Josh Trank extrae la savia de los tics formales estilizados por Matt Reeves en "Cloverfield" para enunciar la génesis de un moderno 'cinema verité' de superhéroes, "Chronicle" anuncia el aterrizaje de un 'frat pack' de tardoadolescentes que viene a guerrear contra la maquinaria pesada del Galactus marveliano. En el futuro inmediato, lo dicta la lógica, el discurso viral de Josh Trank y Max Landis será devorado por la espectacularidad de los "Avengers" de Joss Whedon, pero aquí y ahora tenemos que subrayar que este pequeño acto de rebeldía ilumina la posibilidad de un cine espectáculo intersectado por el drama adolescente.
"Chronicle" no es tanto un hallazgo fortuito del randomizador de YouTube como un virtuoso y concienzudo 'exploit' de "El proyecto de la bruja de Blair" en el que Max Landis (hijo) ha encontrado acomodo a su interpretación del modelo oficial de la épica superheroica, pero mantiene al espectador enganchado a la cola de su cámara subjetiva porque reencuadra el retrato de unos personajes que, abundando en todos y cada uno de los arquetipos 'teen', nos sorprende al desarrollar un sólido arco dramático inesperado en un largometraje de esta naturaleza.
Max Landis (guionista) escribe sobre el tránsito a la madurez a través de la alienación escolar y Josh Trank lo filma afiladamente generando un clímax que resume magistralmente el dilema de la ética y el superpoder sobre el que tanto tiempo llevan discutiendo Sam Raimi, Bryan Singer y Christopher Nolan.
No obstante, la microinstantánea generacional de Josh Trank deja escapar deliberadamente muchos detalles volcándose en una planificación que debería marcarse como primer objetivo proyectar emociones desde el fuera de campo, pero a cambio nos ofrece un generoso espectáculo de lo real amplificado por un ritmo asfixiante.
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