Vuelta de hoja en el calendario y, con ella, llega septiembre. Un mes que muchos aborrecen pues representa la vuelta a las aulas, las obligaciones y los madrugones, pero que, como contraposición, otros adoran. Las temperaturas se suavizan, los hábitos regresan, el orden vuelve a su sitio y las melenas se recogen.
Yo no soy ni de unos ni de otros. Me entristece que se acabe el disfrute de las vacaciones y, a pesar de ello, septiembre me gusta. Y mucho. Soy una persona ordenada en todos los aspectos de mi vida y, aunque soporto con dignidad el caos de las idas y venidas vacacionales, todos los años me encuentro agradeciendo esa vuelta de hoja en el calendario.
Hoy, para celebrarlo, propongo un refrescante dulce que lleva muy poco tiempo de elaboración, que no necesita de horno para estar listo y que está delicioso. Unos chupitos de lima y queso crema que os sorprenderán y que querréis hacer una y otra vez. ¿Los probamos juntos?
Necesitamos (para 6 personas)
- 2 limas
- 50 grs de queso crema
- 90 grs de leche condensada
- 20-30 grs de cereales de chocolate
- 6 vasitos de chupito
- Hojas de menta para decorar
Preparación
Rallamos y exprimimos las limas. Reservamos la ralladura por un lado y el zumo por otro.
En un cuenco amplio, con ayuda de unas varillas metálicas, mezclamos el queso crema y la ralladura de lima. Trabajamos la mezcla durante un minuto para que se integren los dos ingredientes.
Incorporamos la leche condensada y seguimos batiendo con las varillas hasta obtener una mezcla homogénea.
Agregamos el zumo de lima y mezclamos de nuevo hasta homogeneizar.
Acto seguido, rellenamos los vasitos. Por efecto del zumo de lima la mezcla comienza a espesar de forma inmediata, así que no conviene esperar. Dejamos reposar los vasitos en la nevera durante un par de horas.
En el momento de servir, machacamos ligeramente los cereales en un mortero y los repartimos entre los vasitos. Decoramos con unas hojas de menta, frambuesas, moras o cualquier otra cosa que tengamos a mano.