No me considero un gran fan de Thom Yorke, sí de Radiohead, pero su obra por fuera de la banda de Oxford nunca terminó de cerrarme. Hasta inclusive en discos de la banda como The Kings of Limbs en los que suenan demasiado maquinosos, se nota el tic de Yorke en cierta impaciencia percusiva que me pone nervioso. Así y todo decidí enfrentar Atoms for Peace. Y encontré mucho de lo que temía.
Sigo sin encontrar una canción. Pero la entrada en bermudas de Flea le aporta sabrosos momentos.
Es ese cruce de laboratorio y jam en la playa mirando surf en Before your very eyes y Reverse running. Atención a las entradas de bajo y guitarra en una y otra canción. Espirítu libre entre tanto tubo de ensayo.