Cinco lobitos por Sr. Lobo

Por Saval

Hoy no es domingo pero soy un tipo despistado que dejo las cosas siempre para demasiado tarde. Hoy escribe aquí el mejor. Según mi criterio, claro. Un tipo genial que tiene un blog de relatos inmejorable. Me ha costado meses convencerle pero ya está. Escribe desde Oregón porque nosotrxs, los españoles, somos así. Expulsamos el talento para quedarnos con la basura.

Duele

y mucho

repetir tu nombre en voz alta

como si las palabras pudieran llegar allá arriba,

cogerte de las alas

y bajarte otra vez

para jugar a los cinco lobitos,

como hacías conmigo cuando tenía edad de sonreír por todo,

y llorar por no verte más

no entraba en mis planes

Recuerdo una de las últimas veces que te vi

aquí, desde la lejanía,

entre lágrimas sonrío al hacerlo,

la abuela conoce un chico que está en

Boston o algo así, me decías

y te contestaba con la misma sonrisa

de cuando era un niño

yo estaré a la otra punta,

pero no te preocupes, abuela,

todo irá bien

A la otra punta,

qué cerca queda todo ahora

Dónde estarás tú sino más lejos

Tal vez desde allí escuches el dolor de

los gritos

silenciados desde mi habitación

o sientas cómo mis manos se agarran

fuerte a las sábanas

simulando tus abrazos

pero son fríos y distantes.

Tampoco me preguntan cuándo

volveremos a vernos

como siempre preguntabas antes de

decir adiós

Cuándo volveremos a vernos

Ya no lo sé

Cómo pensar en eso

Prefiero cerrar los ojos,

volver a los seis años

y jugar a cinco lobitos contigo,

sentarme en tu regazo una vez más

y que la tranquilidad de tu respiración

acune mis sueños

Ahora los tuyos se han apagado para siempre

pero no te preocupes

que allí arriba hay alguien esperándote,

dale un abrazo de mi parte

y que no se preocupe por mi capital,

como solía preguntarme siempre que iba a veros

Porque si os tengo en el recuerdo no me faltará de nada.