El té verde contiene propiedades que aportan muchos beneficios para nuestra salud que podemos disfrutar durante todo el año, por eso, si consideras que tomar té verde es solo para el invierno, quizá este artículo te haga cambiar de opinión.
¿Por qué tomar té verde en verano?
Estos son los 5 motivos más importantes por los que tomar té verde en verano te harán sentir mejor:
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Protector solar
Tu piel está expuesta durante más tiempo a los rayos UV del sol. Esto hace que se oxide más rápido y se regenere de forma más lenta. Por este motivo, tomar té verde en verano aporta una gran cantidad de antioxidantes que disminuyen la acción del sol y protegen tu piel.
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Digestivo
En verano la digestión puede resultar más pesada por diferentes razones: el calor, tomar más líquidos durante la comida o las siestas propias de este tiempo. Los antioxidantes del té verde favorecen una buena digestión estimulando las secrecciones gástricas y ayudando al buen funcionamiento hepático. ¿Cómo tomarlo?. Se recomienda esperar al menos 30 minutos después de comer para que no impida la absorción del hierro de los alimentos.
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Diurético
Para aliviar el sofocante calor y no sufrir una deshidratación, tomas más líquidos de lo normal durante el verano. Esto puede originar, en algunos casos, retención de líquidos. Tomar té verde te va a ayudar en su eliminación, la cafeína y algunos antioxidantes, como la teofilina, son los responsables.
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Adelgazante
Se trata de un beneficio del té verde interesante durante todo el año. De forma conjunta con la cafeína acelera el metabolismo y favorece la lipoxidación (proceso mediante el cual tu cuerpo utiliza grasas como fuente de energía) y la termogénesis (mecanismo natural del cuerpo para desechar el exceso de calorías y que no se conviertan en grasas acumuladas). También evita la absorción de grasas durante las comidas.
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Estimulante
El calor en verano te sofoca y, según a que hora del día, te hace languidecer y padecer una sensación de flojera y cansancio. Por eso, necesitas tomar algún estimulante para activarte. El té verde contiene cafeína capaz de reducir estos sintomas, con más motivo si es después de comer.
Por supuesto, simpre puedes tomar té verde frío, añadiéndole limón (en rodajas o esprimido) y unas hojas de hierbabuena o menta. En este artículo puedes aprender a hacer un té helado.