La importancia de...prepararse adecuadamente
Nada, que un día estas tu tan tranquilo en casa pensando en tus cosas (como por ejemplo ¿tendré la mano izquierda más grande que la derecha?) y de repente caes en la cuenta que aparte de ser un fiera jugando al tute subastado, eres un autentico profesional haciendo píxel art y te dices a ti mismo: ¿oye, y por qué no le saco algún tipo de rendimiento económico a mi afición? Y de ahí a imaginarte carcajeándote como un villano de James Bond en una piscina de champán gracias a los pingues beneficios que tu idea te reportan tan solo pasa un segundo. En pocos minutos ya lo tienes estudiadísimo...que si una tienda online, que si multitud de perfiles en diferentes redes sociales, que si un blog...vamos, que se preparen Los Chichos, porque la frase de: "he triunfado más que Los Chichos" la van a modificar poniéndote a ti en lugar de a ellos. Con que seguridad susurra la ignorancia en los oídos de los soñadores. La realidad es que, cuando te lanzas en pos de conquistar la tan ansiada independencia económica que tus propios cantos de sirena te anunciaban, te das cuenta de que no tienes ni idea de cómo gestionar y sacar adelante lo que te habías propuesto y con cierto pesar vas viendo como tu afición se va convirtiendo en una montaña de sillas que amenaza con aplastarte el día que una de ellas pierda el equilibrio o en el momento en el que te digas a ti mismo: ¿Qué porras hago yo apilando sillas sobre la mesa del comedor?
Afortunadamente, en estos tiempos de saber, conocimiento y preparación específica siempre puedes encontrar un lugar en el que te ilustren y si lo que te mueve es lanzarte a esa inmensa piscina repleta de pececitos con aspiraciones a tiburón que es Internet, que mejor que prepararte estudiando un completo Master en marketing online y comercio electronico que te permita no solo familiarizarte, sino convertirte en todo un erudito de la publicidad online, del marketing en las redes sociales, de las relaciones (en muchísimas ocasiones complicada) con la blogosfera, de los planes de comunicación online (debido fundamentalmente a que te encanta que los planes salgan bien), en el comercio electrónico (basicamente, porque el tradicional esta muriendo de manera lenta y agónica), del marketing en buscadores (que día tan señalado es en el que tu Page Rank sube), de las redes de afiliación, en las operaciones y logística en el comercio digital y sobre todo en los aspectos legales de operar en Internet (que de pensar a que la red de redes es el salvaje oeste a que lo sea hay un salto grande). En esencia, que si no quieres enterarte de que va la película es más un problema vagancia y enajenación mental que por número de ofertas y posibilidades para formarte como esta mandado.
Si vis pacem, para bellum como se derivo de un pasaje de Vegecio. Si quieres paz, si quieres lograr objetivos, prepárate para la guerra, prepárate lo mejor posible para ser una significación real en un mercado cada vez más saturado y competitivo. Nadie dijo que esto fuera a ser fácil, y en Internet a un menos, y es por eso que la idea de hacer un Master en marketing online y comercio electrónico que te lleve a convertirte en una pieza esencial en el organigrama comunicativo/comercial de una empresa o en el dueño de tu éxito en la red (con transparencia y sin subterfugios) no es una mala idea y ni mucho menos una perdida de tiempo, sino una inversión consciente y provechosa de esas horas que son mutiladas por nuestra desidia y esperpénticas elucubraciones personales (¿a caso no he abierto esta reflexión con una de esas descabelladas preguntas que en más de una ocasión nos recorren la autopista sin trafico que por momentos es nuestra mente?).