“Hurlyburly” dirigida por Anthony Drazan en 1998, trata como su título indica, del descontrol, dos productores de cine y un actor en paro no paran de pegarse juergas y de discutir sobre su existencia, mientras uno tiene su vida más bien controlada, (Kevin Spacey), su compañero de casa, (Sean Penn) está al borde del caos porque es todo lo contrario, esnifando y hablando sin parar, y el actor (Chazz Palminteri) tiene una depresión sobre su existencia.Se me hace difícil definir esta película o explicarla, ya que es dura, directa, puede resultar pesada para quien no le guste el tener que estar al cien por cien atento a todo lo que se dice, porque el personaje de Penn no para ni un momento de hablar, de discutir, de opinar, y aparte, tiene una de las escenas más gloriosas y humillantes que he visto nunca, cuando este le suplica al personaje de Meg Ryan entre sollozos que le haga una cosa en particular, una escena sublime, como toda la interpretación de Sean Penn, no en vano se llevo el Premio como mejor actor en Venecia en 1998 por esta película. Aunque no hay que despreciar ni el trabajo de Kevin Spacey, el cual también hace un papel brillante, ni Chazz Palminteri, ese secundario de lujo, donde me atrevería a decir que su interpretación es lo mejor de él que he visto, hasta Meg Ryan, una actriz a la que nunca le he prestado mucha atención, lo hace bien y no desentona con los tres actores, Robin Wright Penn la que por aquel entonces era la mujer de Sean Penn(ahora no sé, porque no paran de dejarse y volver) también interviene en el film, como la mujer que está en medio de todo el meollo, también vemos a una primeriza Anna Paquin como objeto de deseo de los tres actores.No es un film recomendable, ni quizás para ver un sábado por la noche en compañía y palomitas, es un tipo de visionado que se merece verlo a solas si puede ser y sin interrupciones, como he dicho antes, quizás para muchas personas pueda resultar pesada, pero simplemente por ver el trabajo interpretativo que hacen los actores, merece de sobras verla, cuando acabas de visionarla necesitas un cierto tiempo hasta que tu cerebro la compone y la construye, porque tiene mucha información, yo particularmente disfrute mucho con Sean Penn porque es uno de mis actores preferidos y verlo actuar así se me caía la baba.Quizás como película no merezca estar en mi apartado de “Película de categoría superior”, pero con las interpretaciones que tiene se lo merece de sobras, porque sus personajes son magnéticos.Mi puntuación es un 8, e imprescindible para todo cinéfilo que se precie.