Cine de culto: La Montaña Sagrada, de Alejandro Jodorowsky

Publicado el 06 mayo 2013 por Danny @danielbermeo

A Alejandro Jodorowsky no lo conocía, su cine había pasado prácticamente desapercibido para mí. Fue a través de una proyección en un cine club de mi ciudad (hace poco) en el que tuve mi primer encuentro con su arte, por medio de esta obra de culto denominada "La montaña sagrada", de la cual he terminado fascinado. Describir una película como "La Montaña Sagrada" resulta una tarea complicada, tanto como su propio visionado. Podríamos tratar de hacer una breve sinopsis diciendo que el film presenta a una especie de grupo de personas poderosas en el universo que buscan el secreto de la inmortalidad (?) Sí, suena confuso, absurdo y hasta sacado de cuentos infantiles, pero nada más lejos de la realidad. El film es arte puro. "La montaña sagrada" es una auténtica maravilla, una sucesión de imágenes y conceptos indescriptibles que empapan la pantalla, causando admiración, confusión, estupor y finalmente fascinación. Deslumbra por su atrevimiento y su inusual puesta en escena y, por supuesto, una precisa y ambiciosa ejecución. Es surrealismo en esencia. Sus ideas son planteadas con escenas extrañas, dotadas de alto contenido simbólico, muchas de ellas llenas de perturbación, morbo o sexualidad.

Desde el mismo inicio del film somos invitados o introducidos a esta peculiar odisea de imágenes y sonidos fantásticos. Un hombre vestido de negro desnuda a dos mujeres, les corta el cabello mientras estas reaccionan impávidas... ¿Qué significa? Oh sí, la película "desnudará" al hombre, a ese ser peculiar habitante de la Tierra.
Para la Biblia el hombre es polvo, para Jodorowsky el hombre es mierda, y así, tajantemente, metaforiza el concepto. Desde ese instante podemos entender las intenciones de la película que ya en momentos atrás se nos habían planteado sin llegarlo a entender profundamente.
Jodorowsky en su film habla de la atrocidad humana, cuestiona las corrientes filosóficas de la vida, las tradiciones generacionales, se muestra crítica ante todo tipo de acción creada por el hombre como método para generar adeptos (la crítica hacia la iglesia católica es mordaz y genuina), convirtiendo al ser humano en un esclavo más de las costumbres arcaicas, y por el contrario expresa la libertad como el instrumento fundamental para alcanzar la plenitud y la felicidad.

El film presenta al ser humano como un esclavo de la vida, del consumismo, del materialismo, de la sexualidad, de la política, de las guerras, etc. El hecho de que existan "dioses" y que cada uno lleve una vida condicionada por factores externos hace hincapié en este concepto. En la Biblia se narra un episodio en el que Cristo multiplicó los panes y los peces y dio de comer a una multitud; en La Montaña Sagrada se expresa ese episodio con las consecuencias que generaría ese milagro en la actualidad, en esta utopía el egoísmo se haría partícipe y ocasionaría el caos. ¿Qué es esto? Jodorowsky intenta decirnos que los tiempos no son los mismos... ¿Qué ha pasado? El mismo hombre se ha encargado de hacer pedazos su mundo, su sociedad, su universo. La película es como una gran excursión que escarba hacia los pensamientos más recónditos del ser humano. Es un viaje en sí... ¿Qué es lo que se busca? El secreto de la inmortalidad, que convertirá a aquellos hombres y mujeres en dioses, los individuos más poderosos del universo... ¿Pero se halla en realidad el verdadero secreto? No es spoiler lo que indico, pero el fin de todo es la búsqueda y el reencuentro con uno mismo, en realidad nunca hay un "final", Jodorowsky en su última escena nos invita a través de ese sorprendente desenlace a ir más allá, a indagar en la realidad, no hay límites, cada uno constituye su propio dios. ¿Metafísica? Quizás. El film es un despliegue voraz y magnánimo de simbolismos, onomatopeyas, antítesis, ironías, y un infinito etc.  "La montaña sagrada" es un film de mucha comprensión, de disección cuidadosa, de análisis durante y después de su visionado. Muchos podemos aburrirnos con este arte tan atípico y excelso, otros se encontrarán extasiados, lo cierto es que su discurso no deja indiferente a nadie; una propuesta apabullante e impresionante, rica en recursos cinematográficos y argumentales. Una joya exquisita.