La cinta esta basada en un libro de Stephen King que ya le otorga una notoria popularidad pero Carpenter le mete muchos de sus pensamientos y con ello le otorga su marca personal, la convierte en una cinta de autor, a pesar de que ni siquiera el lo ve asi ya que la cinta fue casi un encargo, pero sus rasgos estan ahi, la rebeldía hacia la autoridad, el ataque al sistema de vida norteamericano, el protagonismo coral, la tecnología superando al hombre, la maldad imparable, el humor negro, la mala leche, la banda sonora formando parte integra de la historia y no de adorno, la perfección técnica y por supuesto los cambios de los protagonistas que siempre estan en desconfianza con los demas. Ademas la cinta le da voz a Christine tocando la radio siempre la canción exacta para lo que desea decir el carro, y lo más importante, al quitar la idea del espíritu del anterior dueño y dotar al carro de vida desde su nacimiento uno en verdad cree que Christine esta enamorada de Arnie, el automóvil lo usa, lo cambia, lo posee, pero también lo ama, lo cela, lo defiende, y lo venga, es decir le da mucho mas sentido a todo, y la verdad da mucho mas miedo pensar que un auto se enamora y obsesiona contigo que si el anterior dueño lo habita, lastima que el cambio de Arnie se de tan deprisa porque si no estariamos ante una cinta casi redonda que de todas formas es mas que recomendable, muy entretenida, con una banda sonora de antología, con temas inteligentes y con una maestría técnica y artística que solo alguien del talento de John Carpenter puede darnos.
Calificación: Bastante Bien