LA FAMILIA ADDAMS (THE ADDAMS FAMILY, EU, 1991)Adaptación de la famosa tira comica de Charles Addams que después se convirtió en serie y hasta en serie de dibujos animados, y que conserva el estilo de la serie pero que como tal funciona como gags, one liners y chistes cortos que como una historia en si, y por ello es un deleite ver a tanto personaje raro y estrambótico que rompe las normas sociales de lo normal y lo moral, con personajes sádicos, violentos, sadomasoquistas, sombríos, sarcásticos, sexosos, amorales y un largo etc., además los efectos especiales cumplen por arriba de la nota y aun en la actualidad aguantan debido al aspecto artesanal, no se puede decir lo mismo de los computarizados que como es de esperar envejecen rápidamente, el reparto es bueno con nombres conocidos y una Christina Ricci que de ahí catapulto al estrellato. Lastima que la historia sea tan tramposa y uno no termine de tragarla nunca, después de una rápida introducción de los personajes debido a que el director Barry Sonnenfeld y sus guionistas dan por hecho que conocemos a los personajes, pero al mismo tiempo le dan un vuelvo a la historia tradicional porque se supone que Gomez (Raul Julia) vive tranquilamente con su familia pero no puede olvidar que su hermano Fester lo abandono debido a un pleito hace muchos años, mientras que el abogado Tully (Dan Hedaya) trata de estafar a la familia y encontrara la manera perfecta cuando un golpeador (Christopher Lloyd) hijo de mami idéntico a Fester le proporcionara el plan perfecto. Se hace pasar por el tio y de encontrar donde guarda su fortuna Gomez, en tanto este ha sido engañado su mujer Morticia (Anjelica Huston), la abuela (Judith Malina) y Wednesday (Christina Ricci robando cámara cada vez que aparece) no están tan seguras, al final la trama seguirá un camino obvio y la sorpresa final ya era esperada y hasta tramposa como ya apunte, interesante que Thing sea al final de cuentas el héroe de la cinta, y como apunte antes la cinta funciona más por momentos, por chistes, por escenas, como la maravilla donde los niños Wednesday y Pugsley (Jimmy Workman) representan cierta escena shakesperiana sobreactuada donde la sangre brota a borbotones literalmente y baña a medio publico o esa escena exagerada de esgrima o cierto baile loco, ahí es donde la cinta funciona y donde tiene su encanto. Calificación: Vale la Pena