Circense

Por Viendoteatro

Son las 20.15 h del viernes. Acaban de dar sala en el segundo piso del Teatro IFT;  “Circense” está por comenzar. Luz tenue, música clásica. Una mesa, una silla, un placard, una cama, un gran cuaderno y una figura circular. Los espectadores aguardamos a que comience la función. De repente, se apagan las luces y entran en escena los primeros personajes de esta obra. 
“¿A dónde me mandaron?”, es mi pregunta mental. La primer imagen de esta obra me impacta y me hace cortar, por milésimas de segundos, la respiración.  Y luego, me sumerjo en la historia, sin que me dé tiempo de volver a hacerme ningún cuestionamiento interno; aunque después de verla, inevitablemente, me haré mis propias interrogaciones acerca de mis sueños, miserias y resignaciones. 
Difícil describir la trama en su totalidad. Tampoco tengo la certeza de que, efectivamente,  el autor quiera contar una historia completa, con principio y final. Lo que es evidente es que se muestran fragmentos de la vida de una familia compuesta por un militar, su esposa y Circe, la joven hija de este matrimonio. No pasan más de cinco minutos cuando descubro que cada uno de estos personajes cargan con las heridas (físicas y emocionales) de alguna guerra, y de sus muertes. 
A su vez, se hace alusión constante a las instituciones de la familia, la religión, el matrimonio. En este contexto, y como una forma de escapar de su realidad, Circe deja aparecer desde su placard a distintos personajes fantásticos con los cuáles ríe, llora, se divierte, se enamora, se enoja. A través de sus sueños, o delirios, se replantea la vida que lleva, las imposiciones de su familia, sus propios deseos y  conformismos.  
En este oscuro circo, como lo nombran sus personajes, entre  los que se ven fantasmas, un payaso y un joven soldado, se utilizan algunos recursos teatrales que logran darle un quiebre a las escenas y sorprenderme. En un momento sonrío. Al instante, la situación me hace asustar. Ficción y realidad se entremezclan, se me hace casi imposible distinguir una de la otra, y este seguramente sea  el encanto que le encuentro a la sombría obra de arte.
Salgo del teatro, comienzo a caminar. También a preguntarme qué relación tiene el personaje  de Circe con el cuento de Cortázar que lleva su nombre. Asumo que el autor y director de la obra se inspiró en él. Me voy contenta y me repregunto: “¿A dónde me mandaron?”. Y ahora sí, respondo convencida: a disfrutar de una obra de teatro independiente, que con pocos recursos (materiales) logra una pieza de calidad. A ver actores en crecimiento. A sorprenderme. Y principalmente, a generarme un espacio para reflexionar. 
Ficha Artística
Autoría: Claudio Gatell
Dramaturgia: Claudio Gatell
Actúan:Micaela Barale, Sasi Crowe, Leandro Martin Lopez, Marcelo Roitman, Emilce Rotondo
Participación: Mariano Bassi
Vestuario:Mariana Cirulli
Escenografía: Mariana Cirulli
Fotografía: Mariana Cirulli
Puesta en escena: Claudio Gatell
Dirección: Claudio Gatell
Duración: 80 minutos
TEATRO IFT
Boulogne Sur Mer 549 C.A.B.A.
Teléfonos: 4962-9420 / 4961-9562
Web: http://www.teatroift.webs.com
Entrada: $ 50,00 - Viernes - 20:15 hs - Hasta el 31/05/2013