Con los votos del PP y de Ciudadanos, el Congreso aprobó los vetos del Gobierno contra las leyes de la oposición que pretendía eliminar el llamado impuesto al sol. En total, ya son 24 los vetos registrados por el Ejecutivo y en sólo dos casos, los relativos a iniciativas del PSOE para paralizar la Lomce y para equiparar las condiciones laborales de los trabajadores de subcontratas, la Mesa del Congreso ha desoído el escrito de disconformidad, provocando que el Gobierno haya recurrido ante el Tribunal Constitucional.
Respecto a la proposición de ley contra el impuesto al sol, apoyada por todos los grupos de la oposición, el Gobierno justifica el veto, alegando que la regulación del autoconsumo energético supondría una merma en la recaudación de 162 millones de euros en impuestos y un gasto de 10 millones adicionales para compensar el déficit que provocaría la consecuente reducción de los peajes. Tomando cifras del sector, el Gobierno relata que el autoconsumo representa el 2% del volumen total, lo que supone 220 millones que no se negociarían en el mercado regulado, y detalla que, sin ellos, se produciría una merma de 74 millones en la recaudación fiscal entre el impuesto de generación (15 millones), el impuesto especial de electricidad (11 millones) o el IVA (48 millones). El Ejecutivo estima que retirar el 2% de la generación del pool energético equivaldría a reducir el precio de la electricidad y recaudar otros 74 millones de euros menos. Del mismo modo, el sistema de peajes se recortaría en 50 millones, lo que, a su vez, supondría una merma en la recaudación de otros 14 millones y un gasto adicional de otros 10 millones de euros de los Presupuestos para compensar el déficit en el sistema eléctrico.Los vetos presentados por el Gobierno fueron estudiados hace unos días en la Mesa del Congreso, donde ha sido aceptado merced a los votos de PP y Ciudadanos, recordando que es la Constitución la que atribuye al Ejecutivo esa capacidad de veto. De esta manera nos encontramos con unas normas que son la excepción y el hazmerreír de toda Europa. Y el Parlamento Europeo, que pidió el pasado mes de enero elevar el objetivo de energías renovables para la Unión Europea y abogó por no gravar el autoconsumo de renovables con impuestos "de ningún tipo”, en España, se enfrenta con un Gobierno que mantiene el “impuesto al Sol”.