Tres jóvenes. Dos clanes enfrentados. Un destino. Lucía Campbell es una chica de 16 años que se muda junto a sus padres desde su Zaragoza natal a Edimburgo, tras la muerte de su abuelo paterno. Allí acude a una escuela de élite donde conoce a Blair (y sus dos intimísimas compañeras, Chloe y Marcie), al dulce Bastian MacAllister, y al irreverente Donovan Lombard, dos chicos antagónicos por los que se siente irremediablemente atraída. A Lucía le asaltan unas visiones en las que una joven de cabellos dorados la invita a indagar en el pasado, mientras descubre que hay algo extraño en sus amigos: secretismo, escudos de familia misteriosos, rivalidades... Adéntrate en una historia de lujo, suspense y romance.
Tenía este libro pendiente desde hace más tiempo del que me gustaría reconocer, pero por unos motivos o por otros, no había podido sentarme, encender el ordenador y ponerme a ello. Sí, lo sé, necesito un e-book...O al menos recuperar la posesión de mi tablet. Pero no me quiero ir por las ramas. Estoy aquí para hablar del primer libro de la saga Clanes. Los Iniciados.
Escocia es el país de ensueño para muchos, me consta, y es el marco de esta novela. La protagonista, Lucía, se ve obligada a mudarse a otra ciudad, y no solo eso, sino que a otro país, por decisión de sus padres, puesto que su abuela vive allí. Como dice la sinopsis, allí conoce a Blair, Chloe y Marcie (que a mí me recuerdan un poco al trío de Chicas Malas, la verdad) y a Bastian y Donovan...
¿Qué decir de ellos? La verdad es que no lo sé. Estos dos personajes me han tenido indecisa toda la novela. Digamos que han hecho que tenga la sensación de que no todo es lo que parece, de que no todo es negro o blanco. Si me tuviera que quedar con un favorito, no sabría decantarme por ninguno, aunque he de decir que me ha encantado la pequeña Kass, que sádica ella.
En ese momento, más consciente, lo que acababa de suceder pasaba por mi mente como una sucesión de imágenes confusas. Una mezcla de miedo y curiosidad atenazaba mi corazón. Una parte de mi quería creer en ello, pero otra lo temía y deseaba desterrarlo del recuerdo, porque aún podía paladear aquel embriagador sabor entre dulce y salado. La culpa y el pánico pugnaban por hacerse con el control en mi interior: ¿en qué me había convertido? ¿Qué era yo?
En cuanto al estilo he de decir que creo que es algo que la autora debería pulir. Sobre todo en cuanto al tema de puntuación se refiere. No es que haya faltas ortográficas de esas que hacen que quieras sacarte los ojos, sino que hay oraciones que cuestan de entender un poco porque no están bien puntuadas. Si tuviera que ponerle un pero a la historia, sería ese.
En definitiva, como primera obra de la autora me parece que cumple su función. Hace que su nombre suene y es entretenida. Perfecta para desconectar un rato y sumergirte en una trama llena de secretos, enigmas y extrañas visiones.