Título original : Claraboia
Año de publicación : 2011
Editora : Companhia das Letras
Año de la presente edición : 2011
La misma sensación que antecedió al abrir un libro de Borges la primera vez la sentí ahora con esta obra: algo de temor, mucha curiosidad, y esa ansia creciente de por fin dejarme envolver por la narrativa de José Saramago (Golegã, Azinhaga, 1922 – Tías, Lanzarote, 2010), en este caso una trama que teje con la paciencia y maestría con que una araña elabora su tela.
Y aunque sinceramente no hallé aquel batacazo que esperaba encontrar me resultó muy gratificante ver cómo consigue alternar varias historias que entrelaza sutilmente. Seis familias/personas/mundos diferentes que viven en un mismo edificio en una zona media venida a menos en Lisboa a mediados del siglo pasado y al que nosotros accedemos como un limpiador de vidrios que se gana con los dramas, penurias y dudas que los aquejan.
Y de entre los variopintos personajes: una mujer mantenida por un misterioso amante; una familia luso-española donde ella se siente tan sola en un país de lengua extranjera; dos hermanas que conviven con las dos jóvenes hijas de una de ellas, donde las jóvenes tendrán un coqueteo con el lesbianismo; una familia con una hija joven y bella a procura de su primer empleo; un zapatero y su esposa que deciden alquilar un cuarto de su apretado espacio para ayudarse, y de esa decisión aparece Abel Nogueira como inquilino, quien debe ser el alter ego del propio Saramago: ateo, medio filósofo, y aunque sin rumbo fijo, con destino trazado: el descubrir su lugar en el mundo.
Resulta increíble que esta obra, rechazada por los editores de aquel tiempo (en la década de los 50’s) sea tan actual: por ejemplo, en estos tiempos en facebook todo mundo es feliz, o por lo menos lo aparenta, y en muchos casos muy bien, pero ya al conocer un cachito de la intimidad de esas personas rebosantes de felicidad en la red social comprobamos que no es del todo cierto, que suben fotos de una fantasía que ellos mismos gustarían que sea realidad, igual que los personajes de esta novela, quienes aparentan una realidad totalmente alejada de la dura y a veces triste que día a día viven, esto torna a este libro tan actual aunque los medios sean otros.
Pueden ser varios los motivos para que un editor destine a la sombra y al olvido una obra, pero vaya patinada que tuvieron y para cuando quisieron publicarla a inicios de los años 80’s la negativa del autor fue rotunda, solo sus herederos permitieron su publicación como fue la decisión del autor. Así que empezar a conocer y adentrase al mundo de Saramago con esta obra, la más actual, es conocerlo de manera cronológica, quizá la mejor manera. Para los que ya están deslumbrados con sus obras mayores quizá le encuentren un cierto sinsabor aunque hay que tener en cuenta lo novel que era el futuro nobel cuando la escribió.
Sin la contundencia que imagino encontraré en sus obras más celebradas éstas historias son finas estampas de una Lisboa que aunque de mediados de siglo pasado son tan recurrentes quizá por la condición misma de los seres humanos, con los mismos problemas, filias y fobias de siempre, que la hace tan actual, tan cotidiana, tan nuestra.