Una persona culta e informada usa unas 500 palabras. Un escritor o periodista puede usar unas 3.000. Y Cervantes usó 8.000 palabras diferentes en su obra. A mi me gusta encontrar palabras nuevas. Más de una vez he dejado en algún post verdaderos hallazgos : nefelibata, trapisonda, cazcarria, virgulilla, etc. Y las hay más nuevas y más viejas, pero todas especiales. Por ejemplo, últimamente podemos decir que hay mucha criptomnesia en la red. Pues si, porque, criptomnesia es el fenómeno que consiste en creer que se te acaba de ocurrir algo que en realidad sólo lo estabas recordando, aunque no recuerdes que ya lo sabías. Por ejemplo, cuando plagias involuntariamente un tuit. ¿a que está de moda?
Hay otras tan poéticas como desconocidas. ¿alguien se ha parado a pensar como se llama el olor de la lluvia sobre la tierra seca ? Petricor.
Y cuantas veces hemos visto la bola de pelusa por el pasillo y hemos dicho, !mira, como en las películas del oeste!.Pues eso tiene nombre. Es un estepicursor. Aunque también se llama rodamundos, sorrasca, calamino, boja, salicón, salicor, salicornio, salicornia, barrilla, corredora del desierto, bola del oeste, apretaculos, capitana, malvecino, cardo ruso, planta rodadora, bruja, chamizo, salsola, y rodadora.
Dios ! Tanta palabreja me dejan ojiplática, y ya empiezo a ver fosfenos. (Las manchas luminosas que se ven al frotar los párpados)
En fin, después de esta clase rápida de lengua, me ha entrado sed. Pediré una cerveza con mucha giste. Es decir, una cerveza con mucha espuma. Que hasta en la barra del bar uno puede fardar tirando de vocabulario como si fuera Arturo Pérez Reverte.Importa este contenido