Se trata de Monkey Gone To Heaven, canción incluída en el disco Doolittle, publicado por el sello discográfico 4AD y que contó en las tareas de producción con Gil Norton. Un material que se basa en el surrealismo habitual en la banda, la muerte y la violencia. Además es el tema al que hace referencia la ya mítica portada de Simon Larbalestier.
Esta canción habla de como los seres humanos destruyen los océanos, sobre lo divino o lo terrenal y la numerología bíblica, todo bajo esa capa de distorsión marca de la casa y en la que destaca la aportación de violonchelos en un tema de estas características.
Escrita por Frank Black, es recordada por su interpretación, en las que parones del vocalista para que entre la contundente sección rítmica, lo que le otorga una personalidad especial y que ha sido imitado por multitud de bandas actuales. En su edición como single, contaba a modo de cara b con la canción Manta Ray.